LD (EFE) Para Trichet, los riesgos para la inflación incluyen subidas adicionales del petróleo, el traslado del encarecimiento energético a otros precios y nuevas subidas de los impuestos indirectos y de los precios administrados.
Sin embargo, el mayor peligro y la fijación de precios en general radica en los posibles efectos de segunda ronda sobre los salarios, afirmó el responsable del BCE durante su comparecencia ante la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo. Por eso, pidió responsabilidad a los agentes sociales en la negociación salarial, sobre todo en el contexto de una coyuntura económica más favorable.
Trichet consideró que en este momento se dan las condiciones para que continúe el "fortalecimiento progresivo" de la actividad en la zona euro, aunque señaló que las perspectivas están condicionadas por algunos "riesgos a la baja", relacionados con el precio del petróleo y los desequilibrios de la economía global. La consolidación fiscal es ahora más importante que nunca, recordó el presidente del BCE, que también apeló a los países con déficit excesivo a que aprovechen la nueva fase de expansión para reducirlo.
El presidente del BCE recordó la necesidad de avanzar en la integración del mercado de servicio y subrayó que el aumento de la competencia en este sector tendría una repercusión positiva sobre los precios. Por último, se refirió a la posible incorporación al euro de alguno de los diez nuevos estados miembros y reseñó que "no se les impondrán nuevos criterios para su incorporación pero tampoco seremos más tolerantes con los requisitos establecidos en el tratado".
Sin embargo, el mayor peligro y la fijación de precios en general radica en los posibles efectos de segunda ronda sobre los salarios, afirmó el responsable del BCE durante su comparecencia ante la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo. Por eso, pidió responsabilidad a los agentes sociales en la negociación salarial, sobre todo en el contexto de una coyuntura económica más favorable.
Trichet consideró que en este momento se dan las condiciones para que continúe el "fortalecimiento progresivo" de la actividad en la zona euro, aunque señaló que las perspectivas están condicionadas por algunos "riesgos a la baja", relacionados con el precio del petróleo y los desequilibrios de la economía global. La consolidación fiscal es ahora más importante que nunca, recordó el presidente del BCE, que también apeló a los países con déficit excesivo a que aprovechen la nueva fase de expansión para reducirlo.
El presidente del BCE recordó la necesidad de avanzar en la integración del mercado de servicio y subrayó que el aumento de la competencia en este sector tendría una repercusión positiva sobre los precios. Por último, se refirió a la posible incorporación al euro de alguno de los diez nuevos estados miembros y reseñó que "no se les impondrán nuevos criterios para su incorporación pero tampoco seremos más tolerantes con los requisitos establecidos en el tratado".