En un discurso pronunciado durante un encuentro del BCE celebrado en Fráncfort, Trichet reiteró que, aunque "existen signos crecientes de estabilización de la actividad económica en la zona euro", aún es "demasiado pronto" para decir que la crisis ha finalizado, ya que los niveles de incertidumbre permanecen altos y la recuperación será desigual.
No obstante, el banquero destacó que ya están preparando la estrategia de salida para cuando sea necesario aplicarla. "Quisiera dejar claro que el BCE tiene una estrategia de salida y que estamos preparados para entrar en acción cuando sea el momento adecuado", subrayó el presidente del BCE.
"La importancia de una estrategia de salida no debe confundirse con su implementación", subrayó Trichet, quien señaló que dicha estrategia deberá ser invocada "en el momento preciso en el que la relación tradicional entre la amplia oferta monetaria y nuestras provisiones de liquidez al sistema bancario se restablezcan por sí mismas".
Esto exige, según explicó, una constante y cuidadosa monitorización de las condiciones en las que el banco central suministra créditos a los bancos a la vista de la evolución de la economía y de las expectativas del mercado.
No hay riesgo de deflación
El miembro del consejo ejecutivo del BCE, Jüngen Stark, quien también participó en el evento, reiteró el mensaje de Trichet sobre la economía y las estrategias de salida y descartó la existencia de riesgos deflacionistas en la eurozona.
"No existen riesgos de deflación. Por el momento, los pilares de nuestro marco analítico apuntan a bajas presiones inflacionistas", destacó Stark, quien también reiteró que es por eso que el consejo de Gobierno de la institución considera que los tipos de interés, que se encuentran en niveles históricamente bajos (1%), están en un nivel "adecuado".
Stark destacó que el BCE está "preparado" para retirar las medidas de apoyo no convencionales en el momento adecuado, lo que sucederá "tan pronto como emerjan los riesgos sobre la estabilidad de precios en un contexto de mejora del entorno macroeconómico".
El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) decidió ayer mantener los tipos de interés de la zona euro en el 1%, el nivel más bajo en la historia de la institución.
De este modo, el BCE cumplió con los pronósticos de los expertos y analistas tras haber asegurado en varias ocasiones que los tipos están en "niveles adecuados" después de haber realizado el pasado mayo un recorte de 25 puntos básicos que dejó el precio del dinero el nivel más bajo de su historia para afrontar la recesión económica de la eurozona.