(Libertad Digital) Mientras Zapatero, Solbes y Trujillo continúan empeñados en acudir a la situación económica de España para asegurar que nuestro país "vive el mejor momento económico de la historia democrática", los indicadores internacionales continúan levantando la voz de alarma cuando miran hacia España.
Hace pocos días OCDE, Morgan Stanley y el FMI advertían de la fragilidad de nuestra economía a cuenta del sector exterior y sobre todo de las tensiones en el mercado inmobiliario. Unas tensiones, que en opinión de Morgan Stanley podrían desembocar en un escenario muy desfavorable para el sistema de crecimiento español.
Esta vez, el encargado de sacar tarjeta amarilla a la economía española ha sido el presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet. La ocasión escogida ha sido su comparecencia ante la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo. Allí, Trichet ha constatado que la tendencia de la economía española a perder competitividad y ha recomendado a las autoridades que dediquen "máximos esfuerzos" para mejorar la productividad.
La autoridad monetaria europea ha hecho hincapié en que el escaso avance de la productividad, unido a unos costes laborales que crecen por encima de la media de sus socios, explica la tendencia de la economía española a perder competitividad frente al exterior. No obstante, Trichet ha concedido que España muestra algunos "elementos buenos", como la elevada tasa de ahorro, y otros elementos que considera "menos buenos", como puede ser el citado frenazo del incremento de la productividad.
Además, a preguntas del eurodiputado popular José Manuel García Margalló, Trichet ha reiterado la necesidad de que los organismos supervisores de los diferentes países de la Unión deben gozar de mayor independencia. Sobre el caso de Manuel Conthe, en concreto, el presidente del Banco Central Europeo ha dicho que hace mucho tiempo que conoce al ex presidente de la CNMV porque ha trabajado con él estrechamente y ha destacado que le profesa un gran aprecio.
Además, a preguntas del eurodiputado popular José Manuel García Margalló, Trichet ha reiterado la necesidad de que los organismos supervisores de los diferentes países de la Unión deben gozar de mayor independencia. Sobre el caso de Manuel Conthe, en concreto, el presidente del Banco Central Europeo ha dicho que hace mucho tiempo que conoce al ex presidente de la CNMV porque ha trabajado con él estrechamente y ha destacado que le profesa un gran aprecio.