L D (EFE) La juez había acordado citar a siete ex consejeros del Santander Central Hispano. Este martes sólo acudieron el ex vicepresidente segundo del banco y ex presidente de Dragados, Santiago Foncillas; y los actuales presidentes de Campofrío y Abengoa, Pedro Ballvé y Felipe Benjumea, respectivamente. El presidente de Cortefiel, Gonzalo Hinojosa, y José Manuel Arburúa, cuyas declaraciones también estaban previstas para este martes, no acudieron a declarar porque tenían compromisos en el extranjero, y las citaciones de los ex consejeros Harry P. Kamen y Axel Von Ruedorffer, representantes de Metlife y Commerzbank en el Consejo del banco, no se cursaron porque no residen en España.
Foncillas, Ballvé y Benjumea coincidieron al señalar que tuvieron conocimiento de los términos del contrato que daba vía libre al "premio de jubilación" de Amusátegui y la cuantía a la que ascendía, y explicaron que el desembolso se justificaba por la gran contribución que hizo al BCH durante su presidencia. Benjumea y Ballvé dijeron que conocieron el pacto al que Amusátegui había llegado con Botín en la reunión del Consejo de Administración que tuvo lugar el 17 de abril de 1999 –la primera tras la fusión– y Foncillas reconoció que se enteró unos días antes porque le informó el propio Amusátegui.
En las reuniones que mantuvieron los Consejos de Administración del Banco Santander y el BCH el 15 de enero de 1999, los presidentes, Emilio Botín y José María Amusátegui, respectivamente, no les informaron de este acuerdo, ya que les explicaron temas más generales de la operación y sus consecuencias. Los tres consideraron que este contrato estaba fuera de los pactos de fusión, aunque era una consecuencia de la operación. Coincidieron al asegurar que el Consejo de Administración también aprobó premios similares para otros consejeros procedentes del BCH, pero no tuvieron que precisar quiénes ya que en esta causa sólo se investiga la legalidad del pago a Amusátegui.
Foncillas, Ballvé y Benjumea coincidieron al señalar que tuvieron conocimiento de los términos del contrato que daba vía libre al "premio de jubilación" de Amusátegui y la cuantía a la que ascendía, y explicaron que el desembolso se justificaba por la gran contribución que hizo al BCH durante su presidencia. Benjumea y Ballvé dijeron que conocieron el pacto al que Amusátegui había llegado con Botín en la reunión del Consejo de Administración que tuvo lugar el 17 de abril de 1999 –la primera tras la fusión– y Foncillas reconoció que se enteró unos días antes porque le informó el propio Amusátegui.
En las reuniones que mantuvieron los Consejos de Administración del Banco Santander y el BCH el 15 de enero de 1999, los presidentes, Emilio Botín y José María Amusátegui, respectivamente, no les informaron de este acuerdo, ya que les explicaron temas más generales de la operación y sus consecuencias. Los tres consideraron que este contrato estaba fuera de los pactos de fusión, aunque era una consecuencia de la operación. Coincidieron al asegurar que el Consejo de Administración también aprobó premios similares para otros consejeros procedentes del BCH, pero no tuvieron que precisar quiénes ya que en esta causa sólo se investiga la legalidad del pago a Amusátegui.