L D (Agencias) La multinacional española rehusó realizar comentario alguno sobre esta posible operación. No obstante, el citado diario precisa que si la compra saliera adelante, Verizon y Telefónica se repartirían geográficamente los activos de la británica. Verizon, que participa en una 'joint venture' con Vodafone en América, tomaría el control de los activos en Estados Unidos y Reino Unido, mientras que Telefónica podría hacerse con las actividades en Europa, incluidas las desarrolladas en España, Italia y Alemania. Blackstone y otras firmas de inversión podrían asumir el resto de los activos, entre ellos los correspondientes a Sudáfrica y China.
En todo caso, la operación se encontraría aún en una fase preliminar en la que Vodafone aún no habría recibido ni siquiera el acercamiento de sus pretendientes. De concretarse la oferta, sería con diferencia la de mayor cuantía de las realizadas hasta el momento en el sector de la telefonía. Vodafone parece encontrarse en un momento de transición en el que su consejero delegado, Arun Sarin, intenta devolver la confianza y el pulso a la compañía, después de la venta de su división japonesa. Recientemente, Sarin abandonó la estrategia de desarrollo exclusivo del negocio del móvil para crecer en otros ámbitos, como el del acceso a Internet.