LD (EFE) En una nota, S&P ratificó la calificación de la deuda a corto plazo, pero ha subrayado que en el largo plazo (A-), Endesa no podrá tener mejor "rating" que Enel, el grupo italiano que pasará a controlar el 92 por ciento de la eléctrica española cuando finalice la compra a Acciona de su 25 por ciento.
La agencia de medición, que mantiene en perspectiva negativa la calificación crediticia de la deuda a largo plazo del grupo italiano, también en "A-", valoró el anuncio de la ampliación de capital de hasta 8.000 millones de euros y los más de 10.000 millones que espera recibir en 2009 y 2010 por la venta de activos.
S&P cree que ello, unido a la nueva política de dividendos del grupo italiano con un "pay out" del 60 por ciento del beneficio ordinario, servirán a Enel para reducir su deuda y afrontar la compra a Acciona del 25 por ciento de Endesa.
No obstante, la agencia advierte de que mantendrá en perspectiva negativa hasta principios de julio la calificación crediticia de Enel, y por extensión la de Endesa, a la espera de que la italiana celebre su junta de accionistas para votar la ampliación de capital.
En ese momento, S&P cree que podrá tener "visibilidad suficiente" para determinar si elimina la perspectiva negativa sobre la calificación de Enel y Endesa, si no fuera así, y la eléctrica italiana no consiguiera los 8.000 millones que espera en la operación, la agencia consideraría recortar el "rating" de ambas compañías.
Por el momento, la agencia de medición de riesgos señala que existen riesgos como el deterioro económico de España e Italia, los principales mercados de las dos eléctricas.