(Libertad Digital) Solbes dice, en la entrevista en el diario ABC publicada este domingo, ser consciente de los datos, pero asegura que "el Gobierno ha tomado medidas para estimular la economía a corto plazo y sigue trabajando para plantearse qué hacer a medio y largo plazo, que es lo importante". "Somos plenamente conscientes de las dificultades que se plantean", afirma pese a las negativas reiteradas a llamar a la situación económica por su nombre. Y reconoce que "ahora estamos en una situación de menor crecimiento que va a suponer que la parte de superávit del Estado posiblemente se quede en torno al equilibrio".
El vicepresidente afirma confiado en ABC que "si hacemos las cosas bien, a mitad del próximo año" la situación remontará y "si no nos hemos equivocado con nuestras medidas, volveremos a retomar crecimientos por encima del 3 por ciento". "Si no cometemos errores" la situación mejorará "en un plazo de dos años", reincide. Es por ello que emplaza a esperar a completar el trimestre para poder hablar de estancamiento, ya que un trimestre "son noventa días", aunque acto seguido reconoce que el impacto final de los datos en el paro será "negativo".
Solbes reconoce que "el problema del paro es el más grave de todos" y que "sería estúpido no reconocer esa realidad", pero matiza que "tenemos un sistema de protección social" que funciona y que gracias al ahorro de estos años el Estado podrá hacer frente a "mayores gastos". Aún así, ha asegurado que "si el crecimiento de la economía baja, pensar que el empleo va a aumentar no es realista": asegura que pese a que se han tomado medidas, "nunca logras encajar al 100 por cien".
"Lo que tenemos que hacer ahora son dos cosas, por un lado tomar medidas a corto plazo si cometer errores" mientras trata de cambiarse "el modelo productivo de este país" actuando, pese a la crisis, "vía presupuesto y a través de reformas estructurales".
Paro de los transportistas
Al respecto de las negociaciones con los transportistas, algunos todavía en huelga, el ministro asegura que el Gobierno se ha guiado en torno a criterios de "prudencia" y "sensatez", agotando "las vías del diálogo" hasta llegar a un acuerdo cuyos resultados "no son malos". Respecto a los que todavía secundan la huelga con piquetes en las carreteras, Solbes cree que es "una minoría que no estaba dispuesta a aceptarlo". "La negociación se ha terminado, que no quepa la menor duda", sentencia.
El "espectacular" precio del petróleo
Sobre la subida de los precios de la luz, Solbes estima que una subida adecuada "en términos de pura teoría económica" debería reflejar el coste de su producción, pero reconoce que "eso no es muy realista en este momento" y emplaza a una solución intermedia: "cuanto va a subir no lo sé, lo decidiremos en el Consejo de Ministros".
Solbes sigue pronosticando en ABC un crecimiento de este año y el próximo en torno al 2 por ciento, algo por debajo del 2,3 por ciento iniciales, y rechazando las estimaciones de la mayoría de los analistas. La inflación, atribuida a una subida de los precios del petróleo "absolutamente espectacular", es un fenómeno contra el que "es muy difícil luchar", por lo que dice concentrarse en los efectos de segunda ronda en los que la crisis se trasladaría a salarios y márgenes empresariales, ya que entonces "entraríamos en una dinámica más preocupante".
"Hace un año el petróleo costaba 65 dólares, hoy 135. Si nos cuesta el doble y compramos la misma cantidad, a los españoles nos queda menos dinero para hacer otras cosas y eso lo tenemos que aceptar", sentencia en la entrevista.
Negociación autonómica
En este contexto, Solbes dice en ABC reconocer que las comunidades autónomas tienen "dificultades de recaudación de ingresos", pero matiza que "también las tenemos nosotros". Aún así, dice que no "debería preocuparnos excesivamente cual es la posición del ciclo económico" aunque reconoce que un momento "difícil" como el actual "si hay que apretarse el cinturón lo tendremos que hacer todos". La negociación, que se encuentra en una "primera fase", debería estar lista para el año que viene.
Relación con Sebastián
"Nuestras relaciones personales siempre han sido buenas, lo que no quiere decir que estemos de acuerdo en todo", afirma Solbes ante la pregunta de sus relaciones con el ministro de Industria. Pese a ello, el vicepresidente reconoce que "tenemos discrepancias sobre algunos puntos" ya que sus discusiones son muy "técnicas".