LD (Agencias) Si hace pocos días Zapatero admitía pronunciar la palabra "crisis" para definir la situación económica de España, el término que suena este jueves entre los miembros del Ejecutivo es "recesión".
Tras presidir la reunión de la nueva Comisión Delegada del Gobierno para Política Científica y Tecnológica, Solbes ha subrayado que en todo caso las previsiones económicas dependen de los supuestos en los que se basan. En este sentido, ha reconocido, a su manera, la posibilidad de que nuestro país entre en recesión. Según ha dicho, "si uno considera que va a seguir aumentando el precio del petróleo, que la economía americana no se va a reponer, que la caída en el segundo trimestre en Alemania va a seguir en próximos trimestres, pues evidentemente podríamos tener elementos negativos que podrían afectar a una situación de ese tipo (recesión). Más bien creemos que vamos a tener un crecimiento bajo, pero no estamos analizando esos supuestos", aseguró.
Solbes ha insistido en que los datos que maneja el Ejecutivo no apuntan a una situación de recesión -dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo- y, por tanto, no ofrecen "exactamente los mismos resultados" que los estimados por entidades financieras como el BBVA o Caja Madrid. En todo caso, precisó que habrá que esperar a conocer las cifras de Contabilidad Nacional que publica el INE.
Trimestres difíciles y más paro
El vicepresidente también admitió que los próximos trimestres serán "difíciles" y dijo que si el crecimiento no mejora, habrá más paro, tal y como ha expuesto ya el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho. Así, ha indicado que la evolución del empleo dependerá del crecimiento económico y de su mayor elasticidad. "Si hay márgenes en una empresa para emplear más gente manteniendo los salarios más moderados lógicamente aumentará el empleo. Si la situación de crecimiento no mejora y en el contexto actual vamos a vivir trimestres difíciles, es posible que el paro aumente más", explicó.
En este sentido, se mostró partidario de la moderación de los salarios, alegando que es muy importante mantener al mayor número de trabajadores en activo, por lo que, añadió, "muchas empresas pueden plantearse en algunos casos una mayor moderación salarial si eso permite mantener la actividad".
Contexto cambiante
Solbes también ha dicho que la economía española se mueve en un contexto internacional "enormemente cambiante" y "difícil", con un crecimiento menor de la economía estadounidense, "altibajos" en el crecimiento europeo, tensiones en los mercados financieros y una inflación que resta capacidad de consumo y por tanto actividad.
"Estamos en un contexto enormemente cambiante. El mes pasado salimos del Eurogrupo con un ambiente optimista porque el crecimiento alemán iba muy bien y esta semana hemos salido con unos datos previsiblemente peores. Ni había que ser tan optimistas el mes pasado ni hay que ser tan pesimistas este mes", afirmó. En España, dijo, a todo lo anterior se suma el ajuste que está viviendo el sector de la construcción y en "cierta medida", la inflación.
En cuanto a la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de subir los tipos de interés, Solbes dijo respetar esa iniciativa, aceptarla y tomarla en consideración para actuaciones posteriores, y en cuanto a sus comentarios, afirmó que desde el Gobierno español "se leen con interés y se incorporan a la reflexión, pero no más".
Sobre el planteamiento que publica el 'Financial Times' de crear un G-12, que incluiría a España, el vicepresidente económico consideró que es un "tema interesante" para entender de forma correcta cómo se percibe a España desde fuera.
Sebastián: "Casi recesión"
Sebastián, ministro de Industria, ha sido otro de los miembros del Gobierno que se ha pronunciado sobre la situación económica. En su opinión, estamos en un escenario de "casi recesión". Ha sido durante su intervención en la presentación del libro "Comprender la inmigración" (Alianza) de Guillermo de la Dehesa, que tuvo lugar en Madrid.
Tras el acto, en declaraciones a los periodistas, Sebastián aclaró que el Gobierno no debe "hacer pronósticos" sobre el futuro económico, pues esa es una labor que "corresponde a los analistas privados o a los organismos internacionales".
Preguntado por si considera que España entrará en una situación de recesión o "casi recesión", el responsable de Industria subrayó que "lo que tiene que hacer el Ejecutivo" es "trabajar para que la desaceleración económica sea lo menos intensa posible, dure lo menos posible y se recupere pronto".
Por último, restó importancia a los pronósticos del servicio de estudios económicos del BBVA, que determinan que la economía española tuvo un crecimiento cero entre abril y junio en términos intertrimestrales, porque "lo importante es el crecimiento interanual" y ahí, "estamos por encima del promedio europeo", añadió.
El responsable de Industria llamó a esperar a conocer los datos del segundo trimestre porque "el crecimiento intertrimestral es algo que no se sigue en una economía como la española" ya que, a su juicio, "lo importante es el crecimiento interanual". "Creo que la economía española está creciendo entre el 1,5 por ciento y el 2 por ciento", apostilló.
Podría haber "recesión"
Por último, la más clara ha sido la secretaria general de Industria, Teresa Santero, que ha admitido finalmente la posibilidad de que la economía española entre en "recesión". Algo que sucederá, dice, si se mantiene la "duración del ajuste" y persisten las "condiciones externas", pero se mostró "optimista" ante la posibilidad de que no se produzca esta circunstancia.
Durante la clausura de la asamblea general de la patronal de fabricantes de bienes de equipo Sercobe, Santero advirtió además de que las tensiones en los mercados financieros provocadas por la crisis de las 'subprime' en Estados Unidos y el alza de los precios del crudo "amenazan con provocar la tercera gran crisis energética mundial".
Estos dos elementos, el precio del crudo y la tensión en los mercados financieros, son a su juicio los dos principales "condicionantes" externos que influirán en la evolución de la situación actual. En cuanto al ajuste, la secretaria general de Industria consideró que su "origen es claro", pero que es necesario dilucidar cuál será su duración. "Soy optimista porque hay margen para que el ajuste sea rápido y poco pronunciado", afirmó.