L D (EFE) Jordi Sevilla lamentó sin embargo "el cinismo" del PP en relación con el Impuesto sobre Sucesiones. En su opinión, si el Gobierno realmente considera que ha de suprimirse ese tributo debería llevar un proyecto de ley al Parlamento y "asumir el debate de su eliminación". Jordi Sevilla rechaza pese a todo que se elimine ese tributo y afirma: "Yo, desde luego, me voy a oponer a que se suprima ese impuesto, porque creo en la igualdad de oportunidades". Precisamente uno de los mecanismos para esa igualdad, continuó, es mantener un impuesto que traslade "algo de las mayores oportunidades que, normalmente, tiene el hijo de un rico para financiar políticas para los hijos de los no tan ricos".
El hecho de que se mantenga el Impuesto sobre Sucesiones, dijo, "no quiere decir que no deba retocarse, mejorarse, corregirse o alterarse", como de hecho está proponiendo el partido socialista en Andalucía e incluso en la comunidad de Madrid, añadió. En cualquier caso, reiteró Sevilla, "perderíamos mucho de justicia social si aceptáramos el planteamiento de la supresión del Impuesto sobre Sucesiones". En general, continuó, el sistema fiscal español es ineficaz, "injusto" y hace "muy difícil hacerse rico trabajando, porque penaliza mucho las rentas del trabajo y en cambio, si eres rico pagas muy poco"; sin embargo, "no me resigno contra eso", precisó.
En cuanto a la posibilidad de propiciar un debate en las Cortes para mejorar la redistribución de la riqueza en España, Sevilla lamentó la falta de datos y estadísticas fiables y, aprovechando esa crítica, acusó al Gobierno de no haber facilitado aún al Parlamento el informe sobre los efectos del IRPF aprobado en 1998. Sevilla, refiriéndose al libro "Dinero Fresco" en cuya presentación hizo estas declaraciones, tildó de "desalentador" comprobar cómo desde los poderes públicos se ha propiciado la riqueza en España con ciertas recalificaciones de terrenos o dejando "abiertos" determinados ámbitos para fomentar negocios particulares en perjuicio de la iniciativa pública, en sectores como la seguridad privada. Por su parte, el autor de la publicación, Carlos Sánchez, insistió en la novedad que supone la aparición de una nueva clase de ricos "anónimos, desconocidos o con escasa proyección pública", a la que califica de "la nueva aristocracia económica que ha desplazado a las grandes familias".
El hecho de que se mantenga el Impuesto sobre Sucesiones, dijo, "no quiere decir que no deba retocarse, mejorarse, corregirse o alterarse", como de hecho está proponiendo el partido socialista en Andalucía e incluso en la comunidad de Madrid, añadió. En cualquier caso, reiteró Sevilla, "perderíamos mucho de justicia social si aceptáramos el planteamiento de la supresión del Impuesto sobre Sucesiones". En general, continuó, el sistema fiscal español es ineficaz, "injusto" y hace "muy difícil hacerse rico trabajando, porque penaliza mucho las rentas del trabajo y en cambio, si eres rico pagas muy poco"; sin embargo, "no me resigno contra eso", precisó.
En cuanto a la posibilidad de propiciar un debate en las Cortes para mejorar la redistribución de la riqueza en España, Sevilla lamentó la falta de datos y estadísticas fiables y, aprovechando esa crítica, acusó al Gobierno de no haber facilitado aún al Parlamento el informe sobre los efectos del IRPF aprobado en 1998. Sevilla, refiriéndose al libro "Dinero Fresco" en cuya presentación hizo estas declaraciones, tildó de "desalentador" comprobar cómo desde los poderes públicos se ha propiciado la riqueza en España con ciertas recalificaciones de terrenos o dejando "abiertos" determinados ámbitos para fomentar negocios particulares en perjuicio de la iniciativa pública, en sectores como la seguridad privada. Por su parte, el autor de la publicación, Carlos Sánchez, insistió en la novedad que supone la aparición de una nueva clase de ricos "anónimos, desconocidos o con escasa proyección pública", a la que califica de "la nueva aristocracia económica que ha desplazado a las grandes familias".