LD (EFE) Por otro lado, el Consejo de Administración de Eiffage se reunirá el próximo lunes para tratar la OPA de Sacyr y emitirá una recomendación dirigida a sus accionistas sobre la misma. De acuerdo con el calendario publicado por Sacyr, el plazo de los accionistas de Eiffage para acudir a la OPA comienza el 9 de mayo y concluirá el 2 de julio. La ecuación de canje es de doce acciones de la compañía española por cada cinco de la francesa.
La Junta General de Accionistas de Sacyr se reunirá el próximo 30 de junio para someter a votación la ampliación de capital necesaria para hacer frente al pago, que supondrá la emisión de un máximo de 149.126.600 acciones. Una vez que concluya el plazo de aceptación, la AMF publicará el resultado de la opa el 13 de julio y la liquidación se concretará algo más de un mes después, el 16 de agosto.
Sacyr es el quinto grupo constructor español, negocio con el que también está presente en Portugal, Chile e Italia. En cuanto al sector de las concesiones, cuya cartera actual asciende a 310 kilómetros en construcción, Sacyr ocupa el segundo lugar en España y cuenta con negocios en Portugal, Brasil y Chile. La firma española es la primera en España en la promoción de viviendas y patrimonio, con 12.500 millones en activos inmobiliarios, y también desarrolla actividades relacionadas con el agua, medio ambiente, energías renovables y gestión de servicios.
En cambio, la francesa Eiffage ocupa la segunda posición en su negocio de concesiones y figura entre las más importantes del sector de la construcción y de las carreteras de pago de Francia y desarrolla actividades en otros países como Bélgica, Alemania y Polonia. En cuanto a la promoción de viviendas, ocupa el quinto lugar y está posicionada en actividades relacionadas con instalaciones eléctricas en Francia, a través de Forclum.
La Junta General de Accionistas de Sacyr se reunirá el próximo 30 de junio para someter a votación la ampliación de capital necesaria para hacer frente al pago, que supondrá la emisión de un máximo de 149.126.600 acciones. Una vez que concluya el plazo de aceptación, la AMF publicará el resultado de la opa el 13 de julio y la liquidación se concretará algo más de un mes después, el 16 de agosto.
Sacyr es el quinto grupo constructor español, negocio con el que también está presente en Portugal, Chile e Italia. En cuanto al sector de las concesiones, cuya cartera actual asciende a 310 kilómetros en construcción, Sacyr ocupa el segundo lugar en España y cuenta con negocios en Portugal, Brasil y Chile. La firma española es la primera en España en la promoción de viviendas y patrimonio, con 12.500 millones en activos inmobiliarios, y también desarrolla actividades relacionadas con el agua, medio ambiente, energías renovables y gestión de servicios.
En cambio, la francesa Eiffage ocupa la segunda posición en su negocio de concesiones y figura entre las más importantes del sector de la construcción y de las carreteras de pago de Francia y desarrolla actividades en otros países como Bélgica, Alemania y Polonia. En cuanto a la promoción de viviendas, ocupa el quinto lugar y está posicionada en actividades relacionadas con instalaciones eléctricas en Francia, a través de Forclum.
No descarta cambiar de decisión
El presidente de Sacyr, Luis de Rivero, consideró que la oferta que ha lanzado sobre Eiffage, íntegramente en títulos de su empresa, es "por ahora la mejor para todo el mundo", pero dijo que "tal vez" su consejo de administración podría cambiar de decisión. En una entrevista divulgada hoy por la emisora de radio francesa "BFM", Rivero dijo que "estoy a disposición de mi consejo de administración, porque tal vez la decisión de mi consejo de administración no será la misma que tomé yo ayer" sobre una oferta íntegramente basada en títulos de Sacyr por los de Eiffage.
Contestaba así a la pregunta de si no barajaba incluir también una opción con pago en efectivo por los títulos del grupo francés. "Si hacemos una oferta en efectivo, corremos el riesgo de perder a los empleados o a los directivos", argumentó. Es una alusión al hecho de que los trabajadores de Eiffage tienen el 22,4 por ciento de su capital a través de un fondo, y los directivos un 5 por ciento suplementario.
Sacyr propone en su opa doce títulos propios por cada cinco de Eiffage, lo que valora en unos 6.500 millones de euros el 66 por ciento que no controla la constructora española en el "número tres" francés de la construcción y las concesiones. Preguntado por la hipótesis de que Eiffage lanzara una opa en efectivo y de un nivel como el alcanzado por las acciones de la empresa francesa en las últimas semanas, cuando llegó a un techo de 129 euros, Rivero respondió que con su opa "pagamos las acciones con un papel que se revaloriza".
En ese sentido, recordó que cuando salió a bolsa, hace tres años y medio, los títulos de Sacyr valían 9 euros y ahora están en 45, y se han hecho entre tanto tres re-capitalizaciones. En cuanto a las razones para lanzar ahora la oferta sobre la parte del capital de Eiffage que no controla, explicó que había que "conocer la empresa a fondo".
Además, aseguró que hasta la junta de accionistas de Eiffage del miércoles, cuando por segundo año consecutivo se impidió la entrada de Sacyr en su consejo, su objetivo se limitaba a disponer de un tercio de los consejeros. La mesa de la junta privó de voto a 89 accionistas españoles que controlan el 17,5 por ciento del capital de Eiffage, por considerar que estaban concertados con Sacyr.
Estas acusaciones recibieron el apoyo la dirección de Eiffage, y en particular por su presidente, Jean-François Roverato, que desde la llegada de Sacyr al capital de su empresa, hace quince meses, sospecha que tiene intenciones hostiles.
Esa actitud, según Rivero, es la que le llevó a tomar la decisión final de lanzar una opa sobre el cien por cien de Eiffage: "No es posible llegar a un acuerdo entre dos, si uno no quiere".En todo caso, afirmó que "nunca haremos una fusión entre Sacyr y Eiffage", porque "queremos mantener una empresa francesa, con un presidente francés, una dirección francesa y que cotice en la Bolsa de París".
Contestaba así a la pregunta de si no barajaba incluir también una opción con pago en efectivo por los títulos del grupo francés. "Si hacemos una oferta en efectivo, corremos el riesgo de perder a los empleados o a los directivos", argumentó. Es una alusión al hecho de que los trabajadores de Eiffage tienen el 22,4 por ciento de su capital a través de un fondo, y los directivos un 5 por ciento suplementario.
Sacyr propone en su opa doce títulos propios por cada cinco de Eiffage, lo que valora en unos 6.500 millones de euros el 66 por ciento que no controla la constructora española en el "número tres" francés de la construcción y las concesiones. Preguntado por la hipótesis de que Eiffage lanzara una opa en efectivo y de un nivel como el alcanzado por las acciones de la empresa francesa en las últimas semanas, cuando llegó a un techo de 129 euros, Rivero respondió que con su opa "pagamos las acciones con un papel que se revaloriza".
En ese sentido, recordó que cuando salió a bolsa, hace tres años y medio, los títulos de Sacyr valían 9 euros y ahora están en 45, y se han hecho entre tanto tres re-capitalizaciones. En cuanto a las razones para lanzar ahora la oferta sobre la parte del capital de Eiffage que no controla, explicó que había que "conocer la empresa a fondo".
Además, aseguró que hasta la junta de accionistas de Eiffage del miércoles, cuando por segundo año consecutivo se impidió la entrada de Sacyr en su consejo, su objetivo se limitaba a disponer de un tercio de los consejeros. La mesa de la junta privó de voto a 89 accionistas españoles que controlan el 17,5 por ciento del capital de Eiffage, por considerar que estaban concertados con Sacyr.
Estas acusaciones recibieron el apoyo la dirección de Eiffage, y en particular por su presidente, Jean-François Roverato, que desde la llegada de Sacyr al capital de su empresa, hace quince meses, sospecha que tiene intenciones hostiles.
Esa actitud, según Rivero, es la que le llevó a tomar la decisión final de lanzar una opa sobre el cien por cien de Eiffage: "No es posible llegar a un acuerdo entre dos, si uno no quiere".En todo caso, afirmó que "nunca haremos una fusión entre Sacyr y Eiffage", porque "queremos mantener una empresa francesa, con un presidente francés, una dirección francesa y que cotice en la Bolsa de París".