L D (EFE) La subasta de Yuganskneftegaz se celebrará, como estaba previsto, el próximo domingo. Así lo ha asegurado el portavoz del Fondo de Patrimonio Federal de Rusia, Alexandr Komarov, quien añadió que su gobierno se guía “por las decisiones adoptadas hasta este momento por las estructuras rusas”. De esta manera, el ejecutivo de Putin desoye la orden de bloqueo dictada por una jueza de Texas.
De todos modos, aunque el fallo de la magistrada estadounidense no tenga repercusiones en la decisión de las autoridades rusas, sí que afectarán a los bancos occidentales que tenían previsto financiar la compra, y también a las compañías del monopolio ruso de gas natural Gazprom, principal postor en la subasta.
Yukos, la empresa petrolera del magnate Mijail Jodorkovsky arrestado por evasión tributaria, solicitó declararse en quiebra a la Justicia norteamericana –al considerar que su jurisdicción es internacional en temas de bancarrota– con el objeto de impedir la subasta de su filial. Para la juez Letitia Clarks, autora del fallo, “los participantes en el comercio internacional, en Rusia, estados unidos y otras partes, necesitan saber que cuando invierten, pueden hacerlo sin temor a que sus inversiones están sujetas a una confiscación por parte de un gobierno extranjero”.