LD (EFE) En el segundo trimestre, la economía había crecido a un ritmo anual del 3,3 por ciento, después de un ritmo de incremento del 4,5 por ciento entre enero y marzo, según el Gobierno. La mayoría de los analistas esperaba que, tras la revisión y ajuste de cifras, el Gobierno mantendría el cálculo del crecimiento en el tercer trimestre en un ritmo del 3,9 por ciento.
En el ajuste de cifras, el Gobierno subió del 4,9 por ciento al 5 por ciento el aumento de las ventas finales de productos de fabricación nacional. Asimismo, el Departamento de Comercio subió levemente las cifras de la inflación para el tercer trimestre. El índice de precios en el gasto de consumo personal -una medida de inflación a la cual le presta mucha atención la Reserva Federal- subió un 1,9 por ciento. El cálculo preliminar había sido del 1,8 por ciento.
Si se excluyen los precios de alimentos y combustibles, el núcleo de este índice o inflación subyacente, aumentó a un ritmo anual del 0,0 por ciento, en lugar del 0,7 por ciento calculado inicialmente. Las ganancias empresariales antes del pago de impuestos, bajaron a una tasa trimestral del 4,8 por ciento y se ubicaron en una marca anual de 1,12 billones de dólares, la mayor caída desde el tercer trimestre de 2001, un período afectado por los ataques terroristas.
En el tercer trimestre de este año, las ganancias de las empresas sufrieron el impacto de una serie de huracanes que devastaron partes de Florida y otros estados del sudeste de Estados Unidos. El gasto de los consumidores –que equivale a casi el 70 por ciento del producto interior bruto de Estados Unidos– creció en el tercer trimestre un 5,1 por ciento, la mayor subida en tres años. El gasto en bienes duraderos subió un 17,2 por ciento en tanto que el gasto en servicios creció un 3 por ciento. El gasto de los consumidores en bienes no duraderos aumentó un 4,7 por ciento.
En el ajuste de cifras, el Gobierno subió del 4,9 por ciento al 5 por ciento el aumento de las ventas finales de productos de fabricación nacional. Asimismo, el Departamento de Comercio subió levemente las cifras de la inflación para el tercer trimestre. El índice de precios en el gasto de consumo personal -una medida de inflación a la cual le presta mucha atención la Reserva Federal- subió un 1,9 por ciento. El cálculo preliminar había sido del 1,8 por ciento.
Si se excluyen los precios de alimentos y combustibles, el núcleo de este índice o inflación subyacente, aumentó a un ritmo anual del 0,0 por ciento, en lugar del 0,7 por ciento calculado inicialmente. Las ganancias empresariales antes del pago de impuestos, bajaron a una tasa trimestral del 4,8 por ciento y se ubicaron en una marca anual de 1,12 billones de dólares, la mayor caída desde el tercer trimestre de 2001, un período afectado por los ataques terroristas.
En el tercer trimestre de este año, las ganancias de las empresas sufrieron el impacto de una serie de huracanes que devastaron partes de Florida y otros estados del sudeste de Estados Unidos. El gasto de los consumidores –que equivale a casi el 70 por ciento del producto interior bruto de Estados Unidos– creció en el tercer trimestre un 5,1 por ciento, la mayor subida en tres años. El gasto en bienes duraderos subió un 17,2 por ciento en tanto que el gasto en servicios creció un 3 por ciento. El gasto de los consumidores en bienes no duraderos aumentó un 4,7 por ciento.