Royal Bank of Scotland (RBS), entidad controlada por el Estado británico, cree que la situación actual puede derivar en una intervención de Irlanda en las próximas dos semanas y de Portugal en un mes. Este análisis llega el día en que la UE ha admitido que está barajando la posibilidad de destinar hasta 90.000 millones de euros al rescate de Irlanda. Además, el ministro de Finanzas portugués ha admitido en una entrevista para el Financial Times que el riesgo de rescate para su país es "elevado".
El mes de plazo a Irlanda y Portugal, la previsión del analista del RBS para la zona del euro, Silvio Peruzzo, que en un comunicado añade que la intervención de España "no es necesaria ahora mismo", si bien no la descarta porque advirtió de que existe la posibilidad de que próximamente sufra un (nuevo) ataque de los mercados.
A juicio del experto, en la actual coyuntura la UE debería intervenir en la crisis irlandesa para evitar el contagio a otros países. Peruzzo explicó que la UE se ha dado cuenta de que "todos los países miembros de la zona del euro, y no sólo los periféricos" comparten los mismos riesgos, ya que están interconectados después de diez años de unión monetaria. Con esta afirmación del analista se entiende que el Reino Unido, fuera de la zona del euro porque mantiene la libra esterlina, quedaría al margen de estas tensiones.
"Minimizar el daño"
Llegados a este punto, su recomendación es que la UE actúe ahora de forma proactiva en Irlanda, Portugal y también en España, porque así probablemente podrá "minimizar el daño y evitar que el problema contamine al resto de las economías europeas". Y después, añadió, se debería reestructurar la UE y establecer un proceso preestablecido para coordinar mejor la forma de intervenir en casos de crisis como la actual.
Además, sobre España, Peruzzo resaltó que, más que la deuda pública, llama la atención el riesgo que supone el sector privado. La deuda corporativa y la deuda hipotecaria, recordó, suponen un 140% y un 85% del PIB, respectivamente, mientras que la deuda pública representa un 75%.
Por este motivo, señaló que la recuperación de la economía española está ligada a la recuperación del sector inmobiliario y del consumo privado. En cualquier caso, sus expectativas de crecimiento económico para el conjunto de la zona del euro en 2011 se aproximan al 1,5%, aunque con una alta vinculación al crecimiento de la demanda externa.