LD (EFE) Rato ha insistido en que en los últimos cuatro meses los tipos de interés se encuentran en una fase de "relativa estabilidad" tanto desde el punto de vista de los tipos de intervención del Banco Central Europeo como los de mercado. Según ha dicho el vicepresidente primero, el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para 2004 recoge una "importante" reducción de la deuda pública, que a su juicio, es "una garantía de futuro, probablemente la más importante, y una de sus consecuencias es que España puede seguir teniendo bajos tipos de interés, lo que es muy bueno para la inversión y las familias".
El ministro reiteró que el hecho de que el Euribor se mueva en torno al 2,35 y 2,40 por ciento es "una cifra históricamente baja", aunque recordó que en la vida de un préstamo a quince o veinte años "es posible que no siempre estemos en tipos bajos". Por ello, consideró la etapa actual como de "buen momento para endeudarse y también para sanear deudas" y señaló que, si sigue reduciéndose la deuda pública, las oscilaciones de los tipos de interés serán pequeñas "pero se producirán".
Estas declaraciones contradicen las advertencias del Banco de España
Según uno de los últimos informes del Banco de España, en seis años, los hogares españoles han doblado su endeudamiento hasta superar en su conjunto los 428.000 millones de euros y la mayor parte de este endeudamiento se debe a créditos hipotecarios. Por eso, la entidad que preside Jaime Caruana no ha dudado en alertar en varias ocasiones de que esta situación puede tener "implicaciones relevantes" e incluso llegar a afectar "negativamente al crecimiento económico".
Este estudio destaca que España, junto con Italia, Holanda y Portugal, han sido los países de la Unión Monetaria que han registrado mayores tasas de endeudamiento en los últimos años, que en el caso de España le ha llevado a aproximarse a la media europea situada en el 80,3 por ciento de la renta bruta disponible.
El ministro reiteró que el hecho de que el Euribor se mueva en torno al 2,35 y 2,40 por ciento es "una cifra históricamente baja", aunque recordó que en la vida de un préstamo a quince o veinte años "es posible que no siempre estemos en tipos bajos". Por ello, consideró la etapa actual como de "buen momento para endeudarse y también para sanear deudas" y señaló que, si sigue reduciéndose la deuda pública, las oscilaciones de los tipos de interés serán pequeñas "pero se producirán".
Estas declaraciones contradicen las advertencias del Banco de España
Según uno de los últimos informes del Banco de España, en seis años, los hogares españoles han doblado su endeudamiento hasta superar en su conjunto los 428.000 millones de euros y la mayor parte de este endeudamiento se debe a créditos hipotecarios. Por eso, la entidad que preside Jaime Caruana no ha dudado en alertar en varias ocasiones de que esta situación puede tener "implicaciones relevantes" e incluso llegar a afectar "negativamente al crecimiento económico".
Este estudio destaca que España, junto con Italia, Holanda y Portugal, han sido los países de la Unión Monetaria que han registrado mayores tasas de endeudamiento en los últimos años, que en el caso de España le ha llevado a aproximarse a la media europea situada en el 80,3 por ciento de la renta bruta disponible.