LD (Europa Press) El presidente del PP, quien ofreció una conferencia en Zaragoza ante representantes de todas las organizaciones empresariales aragonesas, afirmó que su grupo parlamentario presentará su propia propuesta en el Congreso de los Diputados, sobre política fiscal, el próximo mes de septiembre, en el caso de que no lo haga antes el Gobierno central.
Además, Rajoy opinó que las Administraciones públicas deben tener superávit, más cuando el crecimiento económico de España se sitúa en el tres por ciento, comentó. "España puede superar este crecimiento y preparar un futuro" en el que los fondos de la Unión Europea (UE) se reducirán en un 90 por ciento, según sus cálculos.
El presidente del PP demandó, asimismo, una nueva reforma laboral, aunque no la concretó, y manifestó que esta reforma debe llevarse a cabo mediante "acuerdos". Rajoy propuso también que el Estado "apueste por una política de infraestructuras", de tal manera que se llegue a "crear las condiciones para que los agentes sociales y económicos creen riqueza y empleo".
Las cosas van bien “de momento” gracias a la “inercia” y la “herencia”
Mariano Rajoy dijo que en la actual situación "hay que ocuparse de la economía sobre la base de que las cosas van bien de momento" pero "cada vez hay más competitividad, más deslocalizaciones". Según Rajoy, el Gobierno central de José Luis Rodríguez Zapatero ha realizado una política económica presidida por "la inercia y la herencia". Por eso, "la economía española tiene un nivel razonable y sigue generando empleo". Sin embargo, acusó al Ejecutivo de vivir de la “inacción” y recordó que "tenemos un problema de competitividad derivado de la situación de nuestras exportaciones".
En su intervención, el líder del PP expresó también su preocupación por la inestabilidad institucional en los asuntos territoriales, la generación de conflictos inútiles en la sociedad y la obsesión por la derogación de todo lo anterior. En este sentido, Rajoy volvió a rechazar la reforma de la Constitución española porque "casi nadie lo demanda". Además, dijo que la propuesta de reforma del Senado, que incluye la reforma de la Carta Magna, "sólo sirve para que tengan más presencia los partidos nacionalistas, no nos engañemos".
También se refirió a la reforma global de los Estatutos de Autonomía, a la que dijo que no se opone aunque le “gustaría que fuera para un objetivo distinto que el decir 'hemos reformado los Estatutos". Así, aclaró que el PP apoyará las reformas estatutarias que sirvan para defender los intereses de los ciudadanos.