L D (Europa Press) Rajoy, que participó en Marbella (Málaga) en el acto de celebración de los 100 primeros días de gobierno popular en el municipio, aseguró que, de ganar el PP las próximas elecciones generales, se va a ocupar de la economía "tal y como nos ocupamos en su momento". "Dejamos una buena herencia, pero ahora se ha acabado y ya no vale seguir con la inercia", sostuvo.
Además, Rajoy acusó al Gobierno central de haber "malgastado" la herencia económica que dejó el Ejecutivo del PP, ya que, a su juicio, "España mejoró mucho entre 1996 y 2004, pero la herencia no dura toda la vida". Sobre Pedro Solbes, indicó que el vicepresidente dijo "lo que sabemos todos los españoles: que hay problemas".
Por ello, añadió que cuando el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "habló de la economía diciendo que las cosas iban mejor que nunca, demostró que es un político que está fuera de la realidad". Además, le acusó de mostrarse "insensible" ante las preocupaciones de los españoles: "a las hipotecas, a los salarios, a la subida de la cesta de la compra y a la cuantía de las pensiones", para recordar, a continuación, la importancia de gobernar, "que no es lo mismo que estar en el Gobierno".
Por estos motivos, indicó que desde el PP volverán a "bajar los impuestos", ya que, dijo, "hemos demostrado que sabemos hacerlo". Adelantó, por tanto, que reducirán el IRPF y el impuesto de sociedades, suprimirán el impuesto de patrimonio y solicitarán la Junta de Andalucía que elimine el de sucesiones y donaciones.
"España puede ir mucho mejor de lo que va"
Rajoy también destacó que formará un Gobierno "fiable, previsible y que dé seguridad", un Ejecutivo "con un programa conocido y que no gobierne como se ha hecho estos años, a base de ocurrencias e improvisaciones según sople el viento". Apostó por un Ejecutivo central "que dé a conocer las reglas de juego y con el que uno sepa a que atenerse", criticando que el actual Gobierno del PSOE, "después de tres años y medio de fracasar, se le ocurre una genialidad". "Todo al final consiste en no hacer nada y generar confusión al conjunto de los ciudadanos", argumentó.
También se comprometió a formar un Gobierno "eficaz" porque, dijo, "hemos visto demasiadas veces en los últimos años que lo público no funciona", señalando como ejemplo lo ocurrido en Cataluña a lo largo de este verano, lo que tachó de algo "impropio de una democracia normal", en referencia a los problemas de infraestructuras sufridos en la citada Comunidad.
Por tanto, Rajoy consideró que España "puede ir mucho mejor de lo que va", ya que "lo que ha ocurrido a lo largo de estos cuatro años no es propio de la octava potencia del mundo ni de una democracia occidental, liberal y avanzada". "Cuatro años más de Zapatero sólo serán cuatro años más de nuevos problemas", afirmó.
Así, dijo que desde el PP están "obligados" a ganar las próximas elecciones y consideró que los resultados obtenidos en los pasados comicios municipales "suponen el inicio de un cambio de ciclo político que se confirmará en las generales".