L D (EFE) Prodi participó este lunes en Milán (norte de Italia) en un seminario sobre "Servicios financieros en los mercados de la nueva Europa después de la ampliación", en el que apuntó las aspiraciones de la Comisión en ese ámbito. Se trata de establecer un "Schengen de los mercados", en palabras de Prodi, que aludió así a ese acuerdo para la libre circulación de las personas entre los países signatarios del texto. "Tenemos todavía que recorrer mucho camino para integrar los mercados financieros antes que finalice 2005", dijo el presidente del Ejecutivo comunitario quien matizó, no obstante, que ya existe una regulación de 37 de las 42 medidas previstas en el plan de integración.
La dificultad reside en que, una vez acordadas esas medidas sobre el papel, es necesario que sean asumidas en las legislaciones nacionales de los socios comunitarios, según Prodi. Cuando se consiga, será el momento de abrir un debate con Estados Unidos "para conciliar algunas diferencias y evitar un padecimiento para los mercados, como ha ocurrido en los últimos años. Los mercados europeo y estadounidense representan el ochenta por ciento de los capitales en el mundo. Eso lleva consigo la necesidad de encontrar soluciones en el interés de todos". Durante su intervención en el seminario, Prodi también se refirió a la ampliación de la UE, que a su juicio representa "una extraordinaria oportunidad de inversión en formación y en tecnología, que pueden ayudar al crecimiento de todos e incrementar las posibilidades de desarrollo".
La extensión de la esfera de acción del euro no es suficiente si no va acompañada de la integración de los sistemas bancarios y financieros en el interior de la UE", señaló el presidente de la Comisión, quien hizo hincapié en que esa fusión no implicará la desaparición de las reglas. La ausencia de reglas claras podría tener "efectos devastadores", por lo que esas normas "deben mirar a la estabilidad financiera y evitar fracasos" al tiempo que poner énfasis en los "aspectos éticos". Además, expresó su confianza en que la actual presidencia italiana de la UE dé un empujón a los trabajos en este ámbito, que para Prodi sólo pueden traer beneficios, que añadir a algunos como la reducción de los créditos y los costes complementarios".