(Libertad Digital) A los numerosos retrasos que ha sufrido la financiación autonómica se suma ahora un cambio de ministro. Ya no será Pedro Solbes el encargado de poner cifras a los cambios que quiere Zapatero. Toma el relevo Manuel Chaves como vicepresidente tercero y ministro de Política Territorial. Y, como tal, deberá negociar con las comunidades el nuevo reparto de fondos.
Desde la Junta de Andalucía, el entonces líder regional consideraba que el Gobierno central debía destinar a la financiación autonómica una cantidad «sensiblemente» mayor a la de 7.000 millones de euros que planteó Solbes. Chaves defendía a capa y espada entonces que “no se iba a conformar” con menos de mil millones de euros adicionales.
Pero ahora, la situación ha cambiado sensiblemente, según revela el diario Expansión: el mismo hombre que hacía la reclamación a Zapatero será ahora el encargado de frenar las reivindicaciones y las presiones de gasto de las comunidades.
La primera víctima sería Cataluña –que, como Andalucía, pedía más fondos–. Y será la autonomía a la que ahora Chaves deberá comunicar un recorte de los recursos para la nueva financiación.
La posición actual de los socios del tripartito no es fácil para Chaves: ya han anunciado que no piensan aceptar una inyección de recursos extraordinarios al sistema que sea inferior a los 2.000 millones de euros, la cifra que, según la Generalidad, le había ofrecido el Ejecutivo central.
Su posición es firme, máxime después de que Zapatero se reuniera a finales del año pasado con el propio Chaves, entonces presidente andaluz, y con Montilla, el líder catalán, para pactar la reforma del modelo, lo que le valió las críticas del PP por el "secretismo" y la bilateralidad de las reuniones.
Amenaza del tripartito
La remodelación del Gobierno no ha cambiado el discurso de Cataluña. el pasado miércoles, el portavoz del PSC, Miquel Iceta, daba por hecho que el gobierno regional se plantará en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) si el Gobierno no le ofrece una propuesta «adecuada» en materia de financiación.
“¿Es que alguien piensa que el Govern será menos firme en la defensa de sus intereses que lo que lo fueron los gobiernos de Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha cuando en 1996 votaron no a una propuesta que creían que no era conveniente ni adecuada?”. “La pregunta casi ofende”, concluía el portavoz.