LD (Europa Perss) El número dos de la candidatura del PP al Congreso para las próximas elecciones generales, Manuel Pizarro, se mostró hoy "dispuesto a no insultar a nadie" en la campaña electoral, y a debatir la "idea de España y de Madrid" con sus adversarios políticos "en buena lid".
"Entre todos tenemos que dignificar la profesión política; somos gente generosa, seamos del partido que seamos", aseguró el ex presidente de Endesa en Rascafría, pueblo de la sierra norte madrileña donde protagonizó su primer acto preelectoral en solitario. Rodeado de alcaldes y ediles del PP de municipios de la zona, Pizarro acusó además al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de "improvisar con cosas tan serias como los impuestos".
En este sentido, ha criticado las "ocurrencias" que, a su juicio, plantea el PSOE en este ámbito, advirtiendo de que nadie "se puede fiar de un Gobierno que frivoliza con el dinero de los contribuyentes" y que "no se puede improvisar con algo tan sagrado como son las retenciones en la nómina de la gente".
"Los impuestos son sagrados y, por tanto, una reforma fiscal tiene que ser algo pensado, sensato y con carácter de permanencia", afirmó Pizarro en lo que definió como su "primer día de político en la calle".
Así, también ha señalado que su partido "va a decir claramente" en su programa electoral "lo que quiere hacer" en el campo fiscal. "El PP, además, lo que dice lo hace. Algunos propusieron en la campaña anterior el tipo único, que todavía lo estamos buscando", advirtió.
Tras charlar con vecinos y comerciantes de Rascafría en compañía de la alcaldesa de la localidad, Yolanda Aguirre, que también figura en la lista del PP al Congreso por Madrid, Pizarro dijo que el hecho de elegir un pequeño pueblo serrano para escenificar su estreno preelectoral no era "casual", sino algo hecho a propósito debido a su gusto por la vida en naturaleza.
A este respecto, el número dos de Mariano Rajoy por Madrid aseguró que la responsabilidad que más le ha "costado dejar" al entrar en política ha sido la presidencia del Patronato del Parque Nacional de Ordesa, si bien sigue siendo miembro de la Fundación Santa María de Albarracín, "un pueblo que se caía -dijo-, donde no había futuro y al que tuvimos que darle la vuelta como a un calcetín".
"Había que sacar lo mejor de aquellos sitios y decir a la gente que tenía que vivir de la naturaleza, conservarla, transmitirla a las generaciones futuras", dijo el ex presidente de Endesa, defensor de que "se puede vivir perfectamente de la naturaleza, de los productos artesanales" y del turismo rural.