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Mercadona venderá el vino en botellas cuadradas para ahorrar espacio

Mercadona está decidida bajar sus precios y más en una situación como la actual. Y ha anunciado nuevas estrategias para lograrlo: el “efecto Brad Pitt” (envases trasparentes más baratos) y optimización del espacio en el transporte, incluso con botellas de vino cuadradas.

Así, se han llevado a cabo diferentes estrategias, como aceptar únicamente las mejoras de productos si "añaden valor"; no incrementar los precios de coste si no se ha subido el importe de la materia prima o de los procesos; llenar "siempre" los camiones, los palets, las cajas y los productos, para reducir los gastos en transporte; o cambiar las frutas y verduras que se comercializaban con peso fijo por peso variable. Todas estas novedades las explicó su presidente, Joan Roig, durante la rueda de prensa de presentación de los resultados de la compañía.

De este modo, se han producido cambios como la 'teoría de Brad Pitt', que consiste en que "la gente prefiere ver a este personaje al natural, aunque se le vean más defectos", y, del mismo modo, los envases se han cambiado a paquetes transparentes, para que los consumidores vean el producto, aunque éste no sea tan perfecto como el que aparece en la fotografía, con lo que se reduce en dos céntimos el precio. Del mismo modo, que los botes de especias sean de plástico en lugar de cristal, significa que se gastan 2,5 céntimos menos.


Otra de las mejoras se ha producido al comercializar el aceite en una botella cuadrada, en lugar de redonda, que permite aumentar en 48 unidades la capacidad de la caja en la que se transporta. En este sentido, Roig avanzó que están estudiando la posibilidad de aplicar esta misma política a otros productos. "Venderemos botellas de vino cuadradas", aseguró.

"Céntimos a la alcantarilla"

Los céntimos que se ahorran con estas iniciativas "son céntimos que antes no se llevaba nadie, se tiraban por la alcantarilla", porque "transportar el aire que hay entre botellas, es tirar dinero", apuntó Roig. Así, subrayó que esto es "productividad", aunque destacó que "los productos mantienen "la máxima seguridad alimentaria", porque la calidad "no se puede tocar".

En concreto, entre 1.000 y 1.100 de los 1.500 millones de euros ahorrados han sido por la supresión de costes que "se iban por la alcantarilla". Además, también ha bajado el precio de las materias primas, lo que supone entre 150 y 200 millones de ahorro, que se suman a la reducción de beneficio, ya que se "ha utilizado dinero de los beneficios para vender más barato", apuntó Roig.

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