Los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y UGT, Cándido Méndez, encabezan esta movilización que tiene irónicamente por lema "Por el empleo con derechos y la garantía de nuestras pensiones".
La manifestación transcurre un día después de confirmarse que la tasa de paro en España es ya del 20,05%, y en un momento en el que los agentes sociales están emplazados a apurar con el Gobierno las negociaciones de la reforma laboral. La crisis económica y el consecuente desempleo, pero también la escasez de crédito para empresas y familias centran las reivindicaciones de este Primero de Mayo.
En declaraciones de Cándido Méndez, éste ha reconocido la necesidad de encontrar un “punto de equilibrio entre trabajadores y empresas. El acuerdo es necesario y posible”, ha dicho, por lo que pide que “nos sentemos a negociar”. El líder sindicalista ha considerado también que “hay medidas suficientemente discutidas que podrían ponerse en marcha. El gobierno no es ningún observador, es actor principal”.
Junto a los líderes sindicales hay dirigentes políticos como el coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, el diputado del mismo partido Gaspar Llamazares y el concejal socialista Pedro Zerolo.
Los manifestantes portan numerosas pancartas con todo tipo de reivindicaciones y protestas, como la petición de una vivienda digna o la advertencia del elevado desempleo juvenil.
También se encuentran entre los asistentes grupos de trabajadores de empresas con dificultades, como los empleados del Grupo Marsans, del que es copropietario el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán.