LD (EFE) Durante la suspensión, el presidente de turno de la UE, el luxemburgués Jean-Claude Juncker, ha convocado a las delegaciones del Reino Unido, Suecia, Holanda y Francia, para una serie de entrevistas bilaterales sobre la negociación presupuestaria.
Fuentes comunitarias informaron de que, tras esta ronda de contactos, la Presidencia luxemburguesa presentará una nueva propuesta de compromiso que abarcará tanto el capítulo de gastos como el de ingresos.
El primero en salir del edificio Justus Lipsius, donde se celebra la cumbre ha sido el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, quien ha asegurado que los debates entre los líderes durante el almuerzo han resultado "prácticamente inútiles". A continuación abandonaron el edificio el canciller alemán, Gerhard Schroeder; el belga, Guy Verhofstadt; y el presidente francés, Jacques Chirac.
El primer ministro de Eslovaquia, Mikulas Dzurinda, se ha excusado ante los periodistas: "tenemos que permanecer en silencio si queremos un acuerdo". Preguntado entonces si el silencio es lo que merecen los ciudadanos, Dzurinda ha añadido: "lo que es bueno para los ciudadanos es que tengamos un acuerdo sobre el presupuesto".
En las entrevistas bilaterales, la presidencia luxemburguesa del Consejo estará asistida por la Comisión Europea. Una portavoz comunitaria ha asegurado que "hay movimientos" en lo que respecta al "cheque británico". Según ha avanzado esta fuente, la tarde "va a ser larga, larga y difícil", pero ha añadido que, "si no se hubieran convocado bilaterales, querría decir que no hay esperanza de acuerdo".
Según el primer ministro de Lituania, Algirdas Brazauskas, para los diez nuevos países miembros, la propuesta que actualmente está sobre la mesa "es en general aceptable, salvo en algunos pequeños ajustes". Además, ha dicho que los nuevos países esperan de los contribuyentes netos un "gesto de flexibilidad", en alusión a la negativa del Reino Unido a revisar la devolución anual que recibe de las arcas comunitarias y al empeño de Holanda en rebajar su contribución neta.
El ministro checo de Asuntos Exteriores, Cyril Svoboda, ha indicado que la situación "es muy seria", y ha advertido de que su país "no cometerá un suicidio" por llegar a un consenso a cualquier precio. "Si no logramos un acuerdo este viernes, lo podemos hacer mañana, o la semana próxima o el mes próximo", ha afirmado.