LD (EFE) Los analistas consultados explicaron que, una vez conocidos los detalles de la operación, los inversores empiezan a entender los beneficios que aportará al banco español la compra del Abbey.
También ayudó sustancialmente a su subida, la orden permanente de compra que ha introducido el Santander para hacerse con títulos propios, con un límite de 9,77 euros por acción y hasta el 4 por ciento del capital.
En contra de los títulos del Santander pesan todavía los riesgos a corto plazo que los expertos ven en esta operación, entre las que incluyen la posibilidad de que los accionistas no acepten la oferta o que un competidor presente una más atractiva. También se ve como un riesgo a corto plazo la gran ampliación de capital que se verá obligado a hacer el Santander para pagar la compra del banco británico, por más de un tercio de su capital.
La cotización del Abbey, por su parte, se benefició de la subida del Santander y también de las esperanzas de los inversores de que se presente una oferta más fuerte por parte de otro gran grupo internacional en la que se ofrezca un precio superior. Al cierre de la sesión, la capitalización del Abbey se situó en 12.385 millones de euros, y la del Santander, en 38.099 millones, con lo que conjuntamente ascendería a 50.484 millones de euros.
Al precio de hoy, el precio abonado por el Santander para adquirir el Abbey ascendería a 12.338 millones de euros, incluidos los 557,3 millones de euros de dividendo extraordinario que abonará a los accionistas del Abbey. Los títulos del Santander fueron este martes, de nuevo, los más negociados de la Bolsa española, por tercera sesión consecutiva. Movieron 399,47 millones de euros.
También ayudó sustancialmente a su subida, la orden permanente de compra que ha introducido el Santander para hacerse con títulos propios, con un límite de 9,77 euros por acción y hasta el 4 por ciento del capital.
En contra de los títulos del Santander pesan todavía los riesgos a corto plazo que los expertos ven en esta operación, entre las que incluyen la posibilidad de que los accionistas no acepten la oferta o que un competidor presente una más atractiva. También se ve como un riesgo a corto plazo la gran ampliación de capital que se verá obligado a hacer el Santander para pagar la compra del banco británico, por más de un tercio de su capital.
La cotización del Abbey, por su parte, se benefició de la subida del Santander y también de las esperanzas de los inversores de que se presente una oferta más fuerte por parte de otro gran grupo internacional en la que se ofrezca un precio superior. Al cierre de la sesión, la capitalización del Abbey se situó en 12.385 millones de euros, y la del Santander, en 38.099 millones, con lo que conjuntamente ascendería a 50.484 millones de euros.
Al precio de hoy, el precio abonado por el Santander para adquirir el Abbey ascendería a 12.338 millones de euros, incluidos los 557,3 millones de euros de dividendo extraordinario que abonará a los accionistas del Abbey. Los títulos del Santander fueron este martes, de nuevo, los más negociados de la Bolsa española, por tercera sesión consecutiva. Movieron 399,47 millones de euros.