Según han indicado en un comunicado, esta norma "es una provocación, que tiene como único objetivo "dinamitar las negociaciones en curso".
Para el presidente de USCA, Camilo Cela, "todo lo que se ha vivido estos días no ha sido más que una farsa" y considera que las palabras sobre la negociación del titular de Fomento, José Blanco, "no eran más que una de sus piruetas demagógicas y propagandísticas a las que está tan acostumbrado".
Por este motivo, ha señalado que la huelga es la "única decisión posible para salvar la dignidad de las personas que forman el colectivo". "Ha jugado con la seguridad, han ocasionado gastos a las compañías aéreas y, por supuesto, no le ha importado poner en grave peligro uno de los sectores clave de la economía española", ha dicho Cela del ministro.
Por su parte, el secretario de Comunicación de USCA, César A. Cabo, ha negado de nuevo que los controladores hicieran huelgas encubiertas, y ha insistido en que las bajas han sido provocadas por la "aplicación abusiva" de la norma aprobada el pasado mes de febrero por la que se fijan determinadas condiciones laborales para los controladores civiles.
Asimismo, ha asegurado que el lunes pedirán oficialmente a la empresa el informe detallado en las que se basan las "incompletas declaraciones" del Ministerio de Trabajo sobre las labores de inspección de la Seguridad Social, que, a su juicio, "ha servido para demonizar, una vez más, a este colectivo de trabajadores".