LD (EFE) Su declaración como imputado se debe a una querella interpuesta por la Fiscalía Anticorrupción, en la que se le acusa –junto a su hermano y a dos consejeros de Abengoa– de un presunto delito de fraude en la operación de entrada de este grupo en el capital de la operadora de telefonía móvil de tercera generación Xfera.
La Fiscalía sostiene que esta operación perjudicó a los accionistas del grupo, quienes asumieron el coste de la entrada en el capital de Xfera, una compañía que entonces se valoró en unos 673 millones de euros y que ahora apenas tiene valor, puesto que aún no tiene actividad comercial.
Benjumea explicó al juez –según detalló posteriormente en un comunicado– que el 27 de octubre del 2000 se firmó un contrato de indemnidad entre Abengoa e Inversión Corporativa (IC), empresa de los Benjumea a través de la cual controlan el 56 por ciento que tienen del grupo industrial. En este contrato, ratificado por notario en enero del 2001, IC se comprometía con Abengoa a "resarcirle de cuantos daños y perjuicios se le hubieren derivado por el cumplimiento de sus obligaciones", tanto presentes como futuros.
La Fiscalía sostiene que esta operación perjudicó a los accionistas del grupo, quienes asumieron el coste de la entrada en el capital de Xfera, una compañía que entonces se valoró en unos 673 millones de euros y que ahora apenas tiene valor, puesto que aún no tiene actividad comercial.
Benjumea explicó al juez –según detalló posteriormente en un comunicado– que el 27 de octubre del 2000 se firmó un contrato de indemnidad entre Abengoa e Inversión Corporativa (IC), empresa de los Benjumea a través de la cual controlan el 56 por ciento que tienen del grupo industrial. En este contrato, ratificado por notario en enero del 2001, IC se comprometía con Abengoa a "resarcirle de cuantos daños y perjuicios se le hubieren derivado por el cumplimiento de sus obligaciones", tanto presentes como futuros.
Según su versión, este contrato ya se envió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, organismo que inició este litigio abriendo un expediente sancionador a Abengoa por no haberle comunicado cómo había sido la operación de entrada en Xfera. La operación de entrada consistió en que IC, la empresa de los Benjumea, compró el 3,72 por ciento de Xfera por 25 millones de euros y ésta ofreció una opción de compra a Telvent, filial de Abengoa. Cuando Telvent ejerció esa opción de compra, el "boom" de las licencias UMTS ya había remitido y Xfera ya había decidido congelar su actividad hasta que esta tecnología se pusiera en marcha efectivamente.