L D ( EFE ) La tasa inflación interanual se situó en enero en el 2,3 por ciento, 3 décimas por debajo del dato de diciembre, lo que, según ha dicho el ministro de Economía, Rodrigo Rato, supone la tasa más baja desde 1999.
La inflación subyacente, que excluye la variación de los precios de los alimentos frescos y de la energía, descendió el mes pasado el 1 por ciento, con lo que la tasa interanual se colocó en la misma tasa que la general, el 2,3 por ciento.
El grupo que más contribuyó a esa bajada de precios fue el de vestido y calzado, cuyos precios se abarataron un 11 por ciento a consecuencia del periodo de rebajas, seguido del de ocio y cultura, que registró un descenso del 1,4 por ciento, el de menaje, con una bajada del 0,6 por ciento, y del de comunicaciones, que lo hizo el 0,1 por ciento.
El grupo que más contribuyó a esa bajada de precios fue el de vestido y calzado, cuyos precios se abarataron un 11 por ciento a consecuencia del periodo de rebajas, seguido del de ocio y cultura, que registró un descenso del 1,4 por ciento, el de menaje, con una bajada del 0,6 por ciento, y del de comunicaciones, que lo hizo el 0,1 por ciento.
Por el contrario, los principales encarecimientos los registraron otros bienes y servicios, con un aumento de sus precios del 1,8 por ciento, seguido de vivienda y transporte (0,7 por ciento), hoteles, cafés y restaurantes (0,6 por ciento), alimentos y bebidas no alcohólicas (0,5 por ciento), medicina y enseñanza (0,3 por ciento) y bebidas alcohólicas y tabaco (0,1 por ciento).
Los alimentos frescos, los productos energéticos y los servicios sin alquiler se encarecieron el 0,6 por ciento, y los carburantes y combustibles lo hicieron el 0,3 por ciento. No obstante, los bienes industriales se abarataron el 2,6 por ciento en enero, mientras que los bienes duraderos lo hicieron el 0,1 por ciento.
Los alimentos frescos, los productos energéticos y los servicios sin alquiler se encarecieron el 0,6 por ciento, y los carburantes y combustibles lo hicieron el 0,3 por ciento. No obstante, los bienes industriales se abarataron el 2,6 por ciento en enero, mientras que los bienes duraderos lo hicieron el 0,1 por ciento.
Por componentes de los grupos, los encarecimientos que más influyeron en el IPC de enero fueron los del pescado (3,5 por ciento), pan (1,6 por ciento), leche (1 por ciento), agua mineral, refrescos y zumos (1,3 por ciento), seguros (3,3 por ciento), restaurantes, bares y cafeterías (0,7 por ciento), electricidad (1,4 por ciento) y automóviles (0,6 por ciento).
En enero el INE ha llevado a cabo la actualización anual de las ponderaciones utilizadas para el cálculo del IPC con el fin de que refleje los cambios en los hábitos de consumo. Así, a lo largo del 2004 aumentará "el peso" en la cesta de la compra de los alimentos y bebidas no alcohólicas, las comunicaciones, los hoteles, cafés y restaurantes y otros bienes y servicios, mientras que, por el contrario, el resto de los grupos reducen "ligeramente" su ponderación.