LD (Agencias) El principal índice de la bolsa española, el Ibex-35, descendió 384,40 puntos, el 2,59 por ciento, la mayor bajada de los quince últimos días, y acabó la sesión en 14.453,90 puntos –en la semana pierde el 0,55 por ciento–.
El índice general de la Bolsa de Madrid también cayó el 2,59 por ciento –en los cinco últimos días pierde el 0,73 por ciento–, mientras que el tecnológico Ibex Nuevo Mercado cedió el 2,52 por ciento –en la semana sube el 1,2 por ciento–.
En Europa, con el euro a 1,369 dólares, destacó la bajada del 3,71 por ciento de Londres; París, el 3,13 por ciento; Milán, el 2,65 por ciento, y Fráncfort, el 1,48 por ciento. El índice Euro Stoxx 50, que agrupa a los grandes valores europeos, cedió el 2,66 por ciento.
La bolsa empezó la sesión en el nivel de 14.600 puntos, con una caída superior al 1,5 por ciento, determinada por la notable bajada del 2,8 por ciento de Wall Street en la víspera y del 2,4 por ciento de Tokio esta madrugada.
El índice general de la Bolsa de Madrid también cayó el 2,59 por ciento –en los cinco últimos días pierde el 0,73 por ciento–, mientras que el tecnológico Ibex Nuevo Mercado cedió el 2,52 por ciento –en la semana sube el 1,2 por ciento–.
En Europa, con el euro a 1,369 dólares, destacó la bajada del 3,71 por ciento de Londres; París, el 3,13 por ciento; Milán, el 2,65 por ciento, y Fráncfort, el 1,48 por ciento. El índice Euro Stoxx 50, que agrupa a los grandes valores europeos, cedió el 2,66 por ciento.
La bolsa empezó la sesión en el nivel de 14.600 puntos, con una caída superior al 1,5 por ciento, determinada por la notable bajada del 2,8 por ciento de Wall Street en la víspera y del 2,4 por ciento de Tokio esta madrugada.
Bajo el signo del temor
Las inyecciones de fondos decididas por los bancos centrales europeo y estadounidense y las declaraciones de las autoridades estadounidenses de que no había problemas de liquidez, junto a las dificultades de BNP para calcular el valor de algunos de sus fondos, despertaron el temor de los inversores en la víspera.
Con estos antecedentes despertaba el mercado español, que intentaba recuperar el nivel de 14.700 puntos, pero que se lo impedían algunos datos macroeconómicos y noticias financieras.
El crecimiento del 0,1 por ciento de la economía italiana en el segundo trimestre hablaba de la desaceleración de la actividad en el país transalpino, en tanto que la bajada a 69 dólares de los futuros del petróleo Brent indicaban un descenso de la producción en toda Europa.
De Alemania llegaban nuevas inquietantes, como los problemas de Deutsche Bank con alguno de sus fondos y la nueva operación de financiación del Banco Central Europeo (BCE), que introducía 61.000 millones en el sistema financiero (95.000 el jueves).
Se iba el mercado hasta el nivel de 14.500 puntos, sobre el que discurría mientras esperaba a la apertura de Wall Street, que también depararía nuevas sorpresas. Mientras, el precio del oro subía el 1 por ciento en Londres y se aproximaba a 670 dólares la onza.
El crecimiento del 1,5 por ciento de los precios de importación estadounidenses en junio reavivaba el temor a un crecimiento de la inflación, en tanto que la firma de créditos hipotecarios Countrywide Financial reconocía que tenía dificultades financieras.
Además, la Reserva Federal -banco central estadounidense- volvía a inyectar liquidez, 19.000 millones de dólares en esta ocasión (24.000 el jueves), y el organismo supervisor de valores (SEC) anunciaba que estaba investigando a varias firmas de inversión por si sus cuentas hubieran resultado afectadas por las hipotecas de alto riesgo.
De esta manera, Wall Street abría con perdidas superiores al 1 por ciento, que se aproximaron al 2 por ciento cuando estuvo a punto de perder el nivel de 13.000 puntos, lo que afectó a la bolsa española al final de la sesión.
Todos los grandes valores acabaron con pérdidas: BBVA cedió el 3,79 por ciento; Banco Santander, entre rumores de que Barclays podría desistir de comprar ABN Amro, el 3,24 por ciento; Repsol, el 3,07 por ciento, después de que la Mutua Madrileña comprara el 1,4 por ciento de su capital; Telefónica, el 2,68 por ciento; Iberdrola, el 2,21 por ciento, y Endesa, el 0,56 por ciento.
Iberia comandó nuevamente las pérdidas del Ibex al bajar el 5,83 por ciento, al seguir afectada por las pérdidas en el sector, en tanto que Acciona cedió el 4,89 por ciento; Telecinco, el 4,17 por ciento, y Acerinox, el 4,16 por ciento.
Con pérdidas comprendidas entre el 3 y el 4 por ciento acabaron siete compañías: BBVA (3,79 por ciento), Banesto (3,53), Bankinter (3,48), Banco Santander (3,24), Gas Natural (3,15), Repsol (3,07) y Abertis (3,04).
Sólo una compañía concluyó con ganancias, Enagás, cuyos títulos están considerados como deuda de gran solvencia y que subieron el 1,04 por ciento. Inmobiliaria Colonial repitió cotización, en tanto que la menor bajada correspondió a Endesa, el 0,56 por ciento.
Vueling lideró las pérdidas del mercado continuo con una bajada del 11,06 por ciento, por la mala situación que atraviesan las aerolíneas, mientras que Funespaña comandó las ganancias con una subida del 3,85 por ciento, según Efe.
Las inyecciones de fondos decididas por los bancos centrales europeo y estadounidense y las declaraciones de las autoridades estadounidenses de que no había problemas de liquidez, junto a las dificultades de BNP para calcular el valor de algunos de sus fondos, despertaron el temor de los inversores en la víspera.
Con estos antecedentes despertaba el mercado español, que intentaba recuperar el nivel de 14.700 puntos, pero que se lo impedían algunos datos macroeconómicos y noticias financieras.
El crecimiento del 0,1 por ciento de la economía italiana en el segundo trimestre hablaba de la desaceleración de la actividad en el país transalpino, en tanto que la bajada a 69 dólares de los futuros del petróleo Brent indicaban un descenso de la producción en toda Europa.
De Alemania llegaban nuevas inquietantes, como los problemas de Deutsche Bank con alguno de sus fondos y la nueva operación de financiación del Banco Central Europeo (BCE), que introducía 61.000 millones en el sistema financiero (95.000 el jueves).
Se iba el mercado hasta el nivel de 14.500 puntos, sobre el que discurría mientras esperaba a la apertura de Wall Street, que también depararía nuevas sorpresas. Mientras, el precio del oro subía el 1 por ciento en Londres y se aproximaba a 670 dólares la onza.
El crecimiento del 1,5 por ciento de los precios de importación estadounidenses en junio reavivaba el temor a un crecimiento de la inflación, en tanto que la firma de créditos hipotecarios Countrywide Financial reconocía que tenía dificultades financieras.
Además, la Reserva Federal -banco central estadounidense- volvía a inyectar liquidez, 19.000 millones de dólares en esta ocasión (24.000 el jueves), y el organismo supervisor de valores (SEC) anunciaba que estaba investigando a varias firmas de inversión por si sus cuentas hubieran resultado afectadas por las hipotecas de alto riesgo.
De esta manera, Wall Street abría con perdidas superiores al 1 por ciento, que se aproximaron al 2 por ciento cuando estuvo a punto de perder el nivel de 13.000 puntos, lo que afectó a la bolsa española al final de la sesión.
Todos los grandes valores acabaron con pérdidas: BBVA cedió el 3,79 por ciento; Banco Santander, entre rumores de que Barclays podría desistir de comprar ABN Amro, el 3,24 por ciento; Repsol, el 3,07 por ciento, después de que la Mutua Madrileña comprara el 1,4 por ciento de su capital; Telefónica, el 2,68 por ciento; Iberdrola, el 2,21 por ciento, y Endesa, el 0,56 por ciento.
Iberia comandó nuevamente las pérdidas del Ibex al bajar el 5,83 por ciento, al seguir afectada por las pérdidas en el sector, en tanto que Acciona cedió el 4,89 por ciento; Telecinco, el 4,17 por ciento, y Acerinox, el 4,16 por ciento.
Con pérdidas comprendidas entre el 3 y el 4 por ciento acabaron siete compañías: BBVA (3,79 por ciento), Banesto (3,53), Bankinter (3,48), Banco Santander (3,24), Gas Natural (3,15), Repsol (3,07) y Abertis (3,04).
Sólo una compañía concluyó con ganancias, Enagás, cuyos títulos están considerados como deuda de gran solvencia y que subieron el 1,04 por ciento. Inmobiliaria Colonial repitió cotización, en tanto que la menor bajada correspondió a Endesa, el 0,56 por ciento.
Vueling lideró las pérdidas del mercado continuo con una bajada del 11,06 por ciento, por la mala situación que atraviesan las aerolíneas, mientras que Funespaña comandó las ganancias con una subida del 3,85 por ciento, según Efe.
El FMI dice que la actual crisis crediticia será gestionable y "saludable"
El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirmó que, aunque la situación aún está en una fase de desarrollo, "las consecuencias sistémicas de la actual reasignación del riesgo crediticio será gestionable" y supondrán una evolución saludable, según declaró el portavoz de la institución internacional, Masood Ahmed.
El portavoz del FMI consideró que las actuales evoluciones del mercado reflejan las vulnerabilidades a la debilidad en el mercado hipotecario 'subprime' en EEUU y la creciente relajación de los estándares para la concesión de créditos que el organismo ya había subrayado en su último informe sobre la estabilidad financiera global, así como en el boletín 'Perspectivas Económicas Mundiales'.
Sin embargo, el FMI explicó que los elementos fundamentales del crecimiento económico global se mantienen en su sitio y "el reestablecimiento de la disciplina en la concesión de crédito es una evolución saludable".
Asimismo, el organismo señaló que la intervención de los bancos centrales, como el BCE y la Reserva Federal, en los últimos dos días para inyectar liquidez a los mercados debería ayudar a asegurar que este proceso de ajuste de producirá de manera ordenada.