Libertad Digital dispone de un documento de la propia UGT de Andalucía, fechado el 1 de octubre de 2010 por Antonio Tirado Blanco, secretario general de la poderosa Federación de Servicios Públicos de UGT Andalucía y mano derecha de Manuel Pastrana, secretario general, en el que admite sin discusión que apoya la reordenación del sector público andaluz que ha propuesto José Antonio Griñán y que, en lo que se refiere a personal, consiste en "blanquear" el empleo "negro creado mayormente a dedo desde hace años en las empresas públicas y fundaciones equiparando a este personal con quienes para ser funcionarios y/o laborales de la Junta de Andalucía tienen que superar pruebas de acceso". Estamos hablando, según la Cámara de Cuentas, de más de 25.000 personas, la mitad de los empleados públicos actuales de la Junta.
En concreto, en el documento se dice lo siguiente: "No obstante, desde la UGT Andalucía queremos dejar claro nuestro acuerdo con la integración del personal de empresas públicas y fundaciones, defendiendo la igualdad y homogeneización de derechos y condiciones de trabajo para todo el personal de la Junta de Andalucía." De este modo, se acepta la "operación Griñán", denunciada por este periódico digital, y se mantiene un doble lenguaje. Ante los trabajadores de la Junta se acentúa el desacuerdo con la reforma y en este documento se acepta su estrategia.
No cabe duda alguna ya de que UGT de Andalucía deja bien claro que están completamente a favor de que todos los empleados de las Empresas públicas y Fundaciones, es decir, los empleados de la Administración paralela, tengan las mismas condiciones laborales, es más, los consideran literalmente empleados públicos que prestan sus funciones en estas empresas... De este modo UGT oficializa la consolidación de miles de trabajadores que han entrado sin filtro alguno, sin pasar las vicisitudes de las Ofertas Públicas de Empleo y sin moverse de sus localidades. Para la UGT todos somos empleados públicos de la misma naturaleza.
Libertad Digital tuvo acceso en exclusiva al borrador de Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía por el que se aprobaba el Plan de Reordenación del Sector Público. El plan es una clara apuesta por la consolidación de la administración paralela que la propia Junta de Andalucía ha venido creando a lo largo de los últimos 25 años, y en la que no solo pervive esta administración paralela, sino que, por primera vez, la creación de Agencias va a integrar con los mismos derechos al personal funcionario, al personal laboral de la Administración General, y al personal de los entes instrumentales de empresas públicas, fundaciones y consorcios.
El personal de las empresas públicas y organismos sin control parlamentario alguno será el gran beneficiario de la creación de las Agencias. En primer lugar mantiene su convenio de origen hasta que se negocie el Convenio Unificado de la Agencia, momento en que se iguala en derechos con el personal laboral y funcionario de la administración general de la Junta de Andalucía integrado en la Agencia. Pero recuérdese que este personal de empresas públicas y fundaciones, que será así personal público de la Junta andaluza, no ha pasado por los principios reguladores del acceso a la función pública andaluza marcados en la Ley 6/85 de Ordenación de la Función Pública de la Junta de Andalucía.