L D (EFE) Castagnola ha destacado la fuerte incidencia del Impuesto sobre el Valor Agregado y el trabajo, así como el gran incremento de declaraciones de contribuyentes presentadas por Internet. Sin embargo, el funcionario considera que “la presión es aún baja en términos internacionales, por el peso de la evasión tributaria”.
En Argentina, los impuestos al consumo suponen casi el 48 por ciento de los ingresos, casi 20 puntos porcentuales más que en los miembros de la OCDE. En el caso de los impuestos sobre la renta, la situación se invierte. En Argentina la recaudación es del 19 por ciento, frente al 50 por ciento de Estados Unidos o Canadá.
Los especialistas consultados por el diario argentino La Nación opinan, sin embargo, que la actual presión tributaria no es sostenible y recuerdan el compromiso del Gobierno de eliminar el impuesto al cheque y las retenciones de las exportaciones, dos de sus principales fuentes de ingresos.