LD (EFE) Tanto empresarios como sindicatos reiteraron de nuevo sus críticas a la propuesta de reforma presentada por el Ministerio de Trabajo este martes, y que se centra en generalizar el contrato de fomento del empleo estable, rebajar las cotizaciones empresariales, aumentar la protección de los trabajadores y parados, fomentar la igualdad y regular las contratas y subcontratas.
En el caso de la CEOE, su presidente, José María Cuevas, dijo que si el Gobierno no cambia su propuesta "no hay ninguna posibilidad" de llegar a un acuerdo. Esto no significa, precisó, que la CEOE piense "levantarse de la mesa o dar un puñetazo" en ella, porque esa no es la "costumbre", dijo.
Según Cuevas, el acuerdo es difícil porque, tal y como el Ejecutivo plantea la reforma, no va a dar los resultados previstos, que son: reducir la precariedad sin que tenga efectos sobre la creación de empleo y que se dé una mayor simplificación en las modalidades de contratación.
Al este respecto, recordó que CEOE demanda que las nuevas conversiones de temporales a fijos se hagan con el contrato de fomento del empleo estable –cuya indemnización por despido es de 33 días por año con un tope de 24 mensualidades–, en vez utilizarse la modalidad de "fijo ordinario", cuya cobertura es de 45 días con un tope de 42 mensualidades.
Además, la patronal reclama que se simplifiquen las modalidades de contratación existentes, ya que, a juicio de Cuevas, en la actualidad existe un "bosque que origina distorsiones y pérdida de competitividad". La extensión del contrato de fomento de empleo estable no va a conllevar el despido de los fijos con una indemnización de 45 días, precisó el secretario general de la CEOE, Juan Jiménez Aguilar, que dijo que la CEOE está dispuesta a firmar un acuerdo que les garantice "de por vida" el mantenimiento de ese derecho.
Jiménez Aguilar también criticó las rebajas de cotizaciones planteadas por el Gobierno: de 414 millones de euros en las cotizaciones al desempleo, cuando el excedente previsto para 2006 es de unos 4.000 millones; y de 40 millones al Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), cuando éste acumula un excedente de 3.354 millones de euros, que permite "estar sin cotizar siete años" sin afectar a su estabilidad. Por ello, advirtió, "aunque las rebajas fueran más sustanciales no íbamos a cambiar rebajas por más rigidez" en el mercado laboral.
En el caso de la CEOE, su presidente, José María Cuevas, dijo que si el Gobierno no cambia su propuesta "no hay ninguna posibilidad" de llegar a un acuerdo. Esto no significa, precisó, que la CEOE piense "levantarse de la mesa o dar un puñetazo" en ella, porque esa no es la "costumbre", dijo.
Según Cuevas, el acuerdo es difícil porque, tal y como el Ejecutivo plantea la reforma, no va a dar los resultados previstos, que son: reducir la precariedad sin que tenga efectos sobre la creación de empleo y que se dé una mayor simplificación en las modalidades de contratación.
Al este respecto, recordó que CEOE demanda que las nuevas conversiones de temporales a fijos se hagan con el contrato de fomento del empleo estable –cuya indemnización por despido es de 33 días por año con un tope de 24 mensualidades–, en vez utilizarse la modalidad de "fijo ordinario", cuya cobertura es de 45 días con un tope de 42 mensualidades.
Además, la patronal reclama que se simplifiquen las modalidades de contratación existentes, ya que, a juicio de Cuevas, en la actualidad existe un "bosque que origina distorsiones y pérdida de competitividad". La extensión del contrato de fomento de empleo estable no va a conllevar el despido de los fijos con una indemnización de 45 días, precisó el secretario general de la CEOE, Juan Jiménez Aguilar, que dijo que la CEOE está dispuesta a firmar un acuerdo que les garantice "de por vida" el mantenimiento de ese derecho.
Jiménez Aguilar también criticó las rebajas de cotizaciones planteadas por el Gobierno: de 414 millones de euros en las cotizaciones al desempleo, cuando el excedente previsto para 2006 es de unos 4.000 millones; y de 40 millones al Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), cuando éste acumula un excedente de 3.354 millones de euros, que permite "estar sin cotizar siete años" sin afectar a su estabilidad. Por ello, advirtió, "aunque las rebajas fueran más sustanciales no íbamos a cambiar rebajas por más rigidez" en el mercado laboral.
Los sindicatos creen que la CEOE “sobreactúa”
Debido a que el documento del Gobierno recoge las dos principales demandas de la CEOE –el despido de 33 días y la rebaja de cotizaciones–, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, pidió a la patronal que no "sobreactúe". En su opinión, "lo que está expresado con mayor claridad y mayor precisión son los aspectos más vinculados a la posición de la patronal".