LD (EFE) El titular iraní de Petróleo, Bijan Namdar Zanganeh, explicó a los periodistas que esta subida acordada por el consejo de ministros de la OPEP "será efectiva con fecha del 1 de julio próximo".
En la reunión también se ha acordado "autorizar al presidente de la OPEP, tras consultas con los países miembros, a dar luz verde a un segundo aumento de otros 500.000 barriles en el caso de que se considere necesario" antes de la próxima reunión, prevista por la OPEP para el 19 de septiembre.
La OPEP aprobó también cambiar la composición de la cesta de tipos de petróleo de su barril, que a partir de ahora contará con 11 clases de crudo, uno por cada país miembro, frente a los 7 que se manejaban hasta hoy, entre ellos el mexicano "Tía Juana Light", que queda fuera.
Con la subida decidida, la nueva cuota vigente de diez de los países miembros de la OPEP -todos menos Irak- pasa de 27,5 a 28 millones de barriles diarios (mb/d) y se sitúa así en su máximo nivel histórico. Pero dado que el grupo ya bombea por encima del nuevo límite fijado, la medida no implica un incremento de los suministros reales y ha sido ya descontada por el mercado, donde los precios se encuentran en los umbrales de sus máximos históricos, en torno a los 55 dólares por barril.
En la reunión también se ha acordado "autorizar al presidente de la OPEP, tras consultas con los países miembros, a dar luz verde a un segundo aumento de otros 500.000 barriles en el caso de que se considere necesario" antes de la próxima reunión, prevista por la OPEP para el 19 de septiembre.
La OPEP aprobó también cambiar la composición de la cesta de tipos de petróleo de su barril, que a partir de ahora contará con 11 clases de crudo, uno por cada país miembro, frente a los 7 que se manejaban hasta hoy, entre ellos el mexicano "Tía Juana Light", que queda fuera.
Con la subida decidida, la nueva cuota vigente de diez de los países miembros de la OPEP -todos menos Irak- pasa de 27,5 a 28 millones de barriles diarios (mb/d) y se sitúa así en su máximo nivel histórico. Pero dado que el grupo ya bombea por encima del nuevo límite fijado, la medida no implica un incremento de los suministros reales y ha sido ya descontada por el mercado, donde los precios se encuentran en los umbrales de sus máximos históricos, en torno a los 55 dólares por barril.