L D (EFE) El economista jefe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Jean-Philippe Cotis, contrastó la situación en la zona euro con la reactivación en Estados Unidos, en el Reino Unido y también en Japón, donde el crecimiento ha sido mejor de lo previsto. Para Estados Unidos, la OCDE calcula que el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) puede rondar o superar el 2,5 por ciento en 2003, y para Japón podría pasar del 2 por ciento, si el ritmo en el segundo semestre iguala al registrado en el primero.
Aunque la OCDE no ha finalizado sus nuevas previsiones, que dará a conocer en noviembre próximo, calcula que, en base a los datos del primer semestre y a sus estimaciones para el segundo, el crecimiento del PIB de la zona euro para todo 2003 rondaría sólo un 0,5 por ciento, la mitad de lo que vaticinó hace cinco meses. La OCDE, que estima que el PIB de la zona euro se contrajo un 0,1por ciento en el segundo trimestre (Eurostat habla de un crecimiento nulo), prevé un crecimiento anualizado del 1 por ciento en el segundo semestre. No obstante, espera que zona euro dé paso a una reactivación progresiva.
En rueda de prensa, Cotis tachó de "tenues" las señales precursoras de reactivación en la zona euro y afirmó que si los indicios de relanzamiento "tardan en materializarse", el Banco Central Europeo (BCE) debería bajar los tipos de interés. De momento, recalcó, el BCE debe mantener una actitud de gran vigilancia y ver cómo evolucionan las cosas. También indicó que el ritmo de inflación en la zona euro (en torno al 2 por ciento) no es "completamente satisfactorio" para el BCE, y señaló que el índice de inflación subyacente (excluidos los precios energéticos y agroalimentarios) ronda el 1,7 por ciento.
Alerta sobre los abultados déficit públicos europeos
La OCDE calificó de "loables" los esfuerzos de reformas estructurales iniciados en Alemania, pero dijo que queda "mucho por hacer" en este frente en Europa y que "hay que ir lo más rápidamente posible". Sobre los abultados déficit públicos (5 por ciento del PIB en EEUU y 4 en Francia), advirtió de que son preocupantes a largo plazo para la reactivación, debido a su impacto en la evolución de los tipos de interés.
"Muchas grandes economías de la OCDE tienen ahora déficit amplios y que se agravan, en un contexto en el que las estrategias a medio aplazo están o bien ausentes o bajo presión. Esta tendencia preocupante requiere una vigorosa acción correctiva en cuanto la reactivación económica muestre algún impulso", afirmó. Para Cotis, las rebajas de impuestos anunciadas en varios países de la OCDE deben ser financiadas o bien por ahorros del gasto o por gravámenes que no perjudiquen el crecimiento.
Aunque la OCDE no ha finalizado sus nuevas previsiones, que dará a conocer en noviembre próximo, calcula que, en base a los datos del primer semestre y a sus estimaciones para el segundo, el crecimiento del PIB de la zona euro para todo 2003 rondaría sólo un 0,5 por ciento, la mitad de lo que vaticinó hace cinco meses. La OCDE, que estima que el PIB de la zona euro se contrajo un 0,1por ciento en el segundo trimestre (Eurostat habla de un crecimiento nulo), prevé un crecimiento anualizado del 1 por ciento en el segundo semestre. No obstante, espera que zona euro dé paso a una reactivación progresiva.
En rueda de prensa, Cotis tachó de "tenues" las señales precursoras de reactivación en la zona euro y afirmó que si los indicios de relanzamiento "tardan en materializarse", el Banco Central Europeo (BCE) debería bajar los tipos de interés. De momento, recalcó, el BCE debe mantener una actitud de gran vigilancia y ver cómo evolucionan las cosas. También indicó que el ritmo de inflación en la zona euro (en torno al 2 por ciento) no es "completamente satisfactorio" para el BCE, y señaló que el índice de inflación subyacente (excluidos los precios energéticos y agroalimentarios) ronda el 1,7 por ciento.
Alerta sobre los abultados déficit públicos europeos
La OCDE calificó de "loables" los esfuerzos de reformas estructurales iniciados en Alemania, pero dijo que queda "mucho por hacer" en este frente en Europa y que "hay que ir lo más rápidamente posible". Sobre los abultados déficit públicos (5 por ciento del PIB en EEUU y 4 en Francia), advirtió de que son preocupantes a largo plazo para la reactivación, debido a su impacto en la evolución de los tipos de interés.
"Muchas grandes economías de la OCDE tienen ahora déficit amplios y que se agravan, en un contexto en el que las estrategias a medio aplazo están o bien ausentes o bajo presión. Esta tendencia preocupante requiere una vigorosa acción correctiva en cuanto la reactivación económica muestre algún impulso", afirmó. Para Cotis, las rebajas de impuestos anunciadas en varios países de la OCDE deben ser financiadas o bien por ahorros del gasto o por gravámenes que no perjudiquen el crecimiento.