LD (EFE) El tradicional descenso del IPC en julio como consecuencia de las rebajas no ha sido suficiente para reducir la tasa de inflación interanual, que el pasado mes se elevó una décima hasta el cuatro por ciento, la cifra más alta registrada en un mes de julio desde 1995.
Así, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó en julio el 0,6 por ciento, lo que redujo la inflación acumulada en lo que va de año al 1,7 por ciento, pero elevó la interanual –de los últimos doce meses– una décima, hasta el cuatro por ciento, con lo que el diferencial de inflación con la UE se mantuvo en 1,5 puntos.
La inflación subyacente, que excluye los alimentos frescos y la energía, bajó el uno por ciento, pero su tasa interanual también aumentó una décima, hasta el 3,1 por ciento.
Así, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó en julio el 0,6 por ciento, lo que redujo la inflación acumulada en lo que va de año al 1,7 por ciento, pero elevó la interanual –de los últimos doce meses– una décima, hasta el cuatro por ciento, con lo que el diferencial de inflación con la UE se mantuvo en 1,5 puntos.
La inflación subyacente, que excluye los alimentos frescos y la energía, bajó el uno por ciento, pero su tasa interanual también aumentó una décima, hasta el 3,1 por ciento.
Las rebajas de julio
Según los datos del INE, el descenso del IPC en julio estuvo protagonizado por el abaratamiento, del 11 por ciento, del vestido y el calzado, consecuencia de la temporada de rebajas que también motivó la bajada del 0,6 por ciento del menaje. Por el contrario, las principales subidas las protagonizaron los grupos de ocio y cultura (1,2 por ciento), por el alza de los paquetes turísticos; hoteles, cafés y restaurantes (0,9 por ciento) por los alojamientos turísticos; transporte (0,8 por ciento) por los carburantes y lubricantes; y alimentos y bebidas no alcohólicas (0,4 por ciento) por la carne y la leche.
En los últimos doce meses los grupos más inflacionistas fueron vivienda (6,8 por ciento), debido al gas y gasóleo para calefacción; transporte (5,8 por ciento) por los carburantes y lubricantes; alimentos y bebidas no alcohólicas (4,8 por ciento) por la carne de ave, fruta, leche y patatas; hoteles, cafés y restaurantes (4,5 por ciento); y enseñanza y otros bienes y servicios (3,9 por ciento). Asimismo, desde julio del pasado año los carburantes y combustibles acumulan una subida del 11,8 por ciento, los productos energéticos, del 10,1 por ciento y los alimentos frescos y productos energéticos, del 7,9 por ciento.
Por comunidades autónomas, los precios sólo subieron en Baleares (0,1%), y bajaron en La Rioja (1,1%) Andalucía, Asturias, Extremadura, Galicia y Murcia (0,8%), Canarias, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana (0,7%), Aragón y Navarra (0,6%), Castilla y León, Cataluña y el País Vasco (0,5%), Madrid (0,3%) y Cantabria (0,1%), en tanto que en Ceuta y Melilla descendieron el 1,3 por ciento.
En los últimos doce meses los grupos más inflacionistas fueron vivienda (6,8 por ciento), debido al gas y gasóleo para calefacción; transporte (5,8 por ciento) por los carburantes y lubricantes; alimentos y bebidas no alcohólicas (4,8 por ciento) por la carne de ave, fruta, leche y patatas; hoteles, cafés y restaurantes (4,5 por ciento); y enseñanza y otros bienes y servicios (3,9 por ciento). Asimismo, desde julio del pasado año los carburantes y combustibles acumulan una subida del 11,8 por ciento, los productos energéticos, del 10,1 por ciento y los alimentos frescos y productos energéticos, del 7,9 por ciento.
Por comunidades autónomas, los precios sólo subieron en Baleares (0,1%), y bajaron en La Rioja (1,1%) Andalucía, Asturias, Extremadura, Galicia y Murcia (0,8%), Canarias, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana (0,7%), Aragón y Navarra (0,6%), Castilla y León, Cataluña y el País Vasco (0,5%), Madrid (0,3%) y Cantabria (0,1%), en tanto que en Ceuta y Melilla descendieron el 1,3 por ciento.
Contraste con Alemania
En contraste con el aumento de los precios en España, Alemania ha logrado rebajar la tasa interanual de inflación en una décima, hasta el 1,9 por ciento. Si se excluyeran de la cesta todos los productos energéticos, tanto de consumo doméstico como los carburantes de automóviles, el encarecimiento interanual sólo habría sido del 1,1 por ciento, informa Efe.