Está previsto que el Gobierno catalán apruebe este martes el Acuerdo por el cual otorgará los 10 millones a Avançsa y ésta, a su vez, los aportará a la sociedad Iniciatives Empresarials Aeronàutiques (Ieasa), principal accionista de Spanair con el 80,1% del capital y encargada de nombrar los miembros del consejo. El 19,9% restante está en manos de la sueca SAS, empresa a la que los accionistas catalanes compraron Spanair en 2008.
Spanair y la Generalidad han llegado a un acuerdo para que el nuevo miembro del consejo que represente al Gobierno catalán sea un independiente y no esté vinculado a la administración.
El conseller Josep Huguet ya avanzó que la entrada en el consejo era una cuestión innegociable –"será así o no será"– si la compañía esperaba la inyección del Gobierno catalán como un accionista más.
Con la aportación de la Generalidad, Spanair tiene prácticamente cubiertos los 50 millones de ampliación de capital –sólo quedarían 10 millones– después de que el Institut Català de Finances (ICF) concediera dos créditos de 10 millones de euros cada uno a Turisme de Barcelona y a la asociación de empresarios Volcat, y tras la aportación de Fira de Barcelona de otros 10 millones en junio.
La aerolínea todavía tiene que buscar inversores para cubrir los 10 millones restantes. En caso de no encontrar a ningún inversor más, el ICF se haría cargo de la última aportación necesaria para cubrir la ampliación de capital.
Por otra parte, se han suscrito 40,5 millones de euros de la línea de crédito sindicado bancario de 50 millones, por lo que la compañía también busca captar los 9,5 millones restantes.
El actual consejo está formado por 12 personas, entre las cuales figuran representantes de Turisme de Barcelona, Volcat, Fira de Barcelona, el presidente de Spanair (Ferran Soriano) y responsables de SAS, entre otros.