L D (Agencias) Los expertos consideran que la Fed apostará, tal como señaló en su anterior reunión, por unos niveles de tipos de interés bajos durante un tiempo, con el objetivo de reactivar la economía. "El Comité cree que una política monetaria complaciente, combinada con un crecimiento subyacente robusto de la productividad, suministra un apoyo continuo importante a la actividad económica", afirmó la Reserva Federal después de su última reunión, el 12 de agosto.
Esta política monetaria, según informa Europa Press está dando sus frutos en la evolución de la actividad económica, ya que el PIB de EEUU creció un 3,1% (en base anual) en el segundo trimestre, lo que representa el mayor incremento desde el tercer trimestre de 2002. No obstante, sigue habiendo grandes preocupaciones, ya que, a pesar de que el gasto del consumo ha comenzado a repuntar (con un crecimiento del 3,8% en el segundo trimestre, frente al 2% anterior), existen datos que inquietan a los expertos. Así, las ventas minoristas, un buen indicador de la evolución del gasto del consumidor, aumentaron un 0,6% en agosto, muy por debajo de las previsiones de los analistas. Además, el pasado viernes se conoció que la confianza del consumidor en la evolución de la primera economía mundial empeoró en agosto.
Otra de las preocupaciones de la Fed es la situación del mercado laboral. La tasa de paro de Estados Unidos bajó una décima en agosto, hasta el 6,1%, pero la economía volvió a destruir empleos, un total de 93.000, después de perder otros 44.000 puestos de trabajo en el mes anterior. La política monetaria del organismo presidido por Alan Greenspan ha impulsado también la inversión empresarial en el segundo trimestre, con un incremento del 8% de abril a junio, progresión que no se alcanzaba desde el segundo trimestre de 2000, justo antes de la recesión que afectó a Estados Unidos entre marzo y noviembre de 2001.
Esta mejora de las inversiones empresariales, considerada esencial para la reactivación económica, se produce después de haberse registrados descensos durante nueve de los últimos diez meses. De hecho, el primer trimestre del año se saldó con una caída del 4,4%, coincidiendo con la guerra en Irak. Con esta situación, los analistas estiman que la Fed mantendrá tipos, ya que estas señales de recuperación le permiten descartar reducir aún más el precio del dinero y acabar con la escasa munición que le queda. Así, poco a poco se va cumpliendo el objetivo del instituto monetario estadounidense, que ha acometido desde enero de 2001 un total de trece rebajas de los tipos de interés para reactivar su economía.
Esta política monetaria, según informa Europa Press está dando sus frutos en la evolución de la actividad económica, ya que el PIB de EEUU creció un 3,1% (en base anual) en el segundo trimestre, lo que representa el mayor incremento desde el tercer trimestre de 2002. No obstante, sigue habiendo grandes preocupaciones, ya que, a pesar de que el gasto del consumo ha comenzado a repuntar (con un crecimiento del 3,8% en el segundo trimestre, frente al 2% anterior), existen datos que inquietan a los expertos. Así, las ventas minoristas, un buen indicador de la evolución del gasto del consumidor, aumentaron un 0,6% en agosto, muy por debajo de las previsiones de los analistas. Además, el pasado viernes se conoció que la confianza del consumidor en la evolución de la primera economía mundial empeoró en agosto.
Otra de las preocupaciones de la Fed es la situación del mercado laboral. La tasa de paro de Estados Unidos bajó una décima en agosto, hasta el 6,1%, pero la economía volvió a destruir empleos, un total de 93.000, después de perder otros 44.000 puestos de trabajo en el mes anterior. La política monetaria del organismo presidido por Alan Greenspan ha impulsado también la inversión empresarial en el segundo trimestre, con un incremento del 8% de abril a junio, progresión que no se alcanzaba desde el segundo trimestre de 2000, justo antes de la recesión que afectó a Estados Unidos entre marzo y noviembre de 2001.
Esta mejora de las inversiones empresariales, considerada esencial para la reactivación económica, se produce después de haberse registrados descensos durante nueve de los últimos diez meses. De hecho, el primer trimestre del año se saldó con una caída del 4,4%, coincidiendo con la guerra en Irak. Con esta situación, los analistas estiman que la Fed mantendrá tipos, ya que estas señales de recuperación le permiten descartar reducir aún más el precio del dinero y acabar con la escasa munición que le queda. Así, poco a poco se va cumpliendo el objetivo del instituto monetario estadounidense, que ha acometido desde enero de 2001 un total de trece rebajas de los tipos de interés para reactivar su economía.