(Libertad Digital) El vicepresidente económico, Rodrigo Rato , no ha tardado en calificar de "positivo" el dato de crecimiento del 2,1 por ciento del PIB registrado en el primer trimestre del año en relación con ese período del 2002. Además, subrayó que la economía española creció en los tres primeros meses del año a un ritmo cinco veces superior a la media europea. El PIB de la zona euro se estancó entre enero y marzo repecto al trimestre anterior y creció un 0,8% respecto al mismo periodo de 2002. El secretario de Estado de Economía, Luis de Guindos , coincidió con Rato en sus afirmaciones y valoró el aumento del PIB "a pesar del contexto extremadamente complicado del entorno económico" por lo que comparó el crecimiento del 2,1 por ciento del PIB con el 0,8 por ciento europeo.
Por su parte, el secretario de Política Económica y Ocupación del PSOE, Jordi Sevilla , una vez finalizada la campaña electoral no ha acusado al INE de manipular los datos. Sin embargo, afirmó que un Gobierno "responsable" debería aprovechar el crecimiento del PIB para avanzar en bienestar social y mejorar las prestaciones sociales que reciben las familias e invertir en la competitividad de las empresas. CCOO y UGT calificaron de "positivo" el crecimiento del PIB pero alertaron del aumento del déficit con el exterior y del "muy preocupante problema de inflación". Por último, las Cámaras de Comercio destacaron que el aumento de la actividad haya superado en más de un punto a la media de la UE y auguraron que el PIB crecerá el 2,5 por ciento en el conjunto del año.
"Mejor tono" del consumo y la inversión
El crecimiento del PIB fue resultado del repunte en la contribución de la demanda interna (3 puntos frente a los 2,8 del cuarto trimestre del 2002) debido al "mejor tono" del gasto en consumo final y de la inversión mientras que, por el contrario, la demanda externa contribuyó de forma más negativa y restó 0,9 puntos frente a los 0,7 del periodo precedente. El INE indica que la economía española "ha estabilizado su ritmo de avance" y destaca que el crecimiento intertrimestral del PIB fue del 0,5 por ciento, dos décimas por encima del trimestre anterior. También fija su atención en el empleo , que creció a un ritmo de 1,5 por ciento, lo que supone una creación neta de 228.000 puestos de trabajo a tiempo completo y un cambio radical en la tendencia que venía presentando en los últimos periodos. Este cambio se debe principalmente a la aceleración del empleo en las ramas industriales y de la construcción.
La mejor evolución del empleo y el incremento de la renta disponible han provocado un crecimiento del gasto del consumo final de los hogares del 2,1 por ciento, dos décimas más que en el trimestre anterior. Además, el consumo colectivo de las Administraciones Públicas aceleró una décima su crecimiento, hasta el 4,3 por ciento, y la inversión aumentó 5 décimas en relación con el trimestre anterior, hasta el 2,9 por ciento, producto del vigor que sigue mostrando la formación bruta de capital en construcción (4,1 por ciento).
En lo que respecta al comercio exterior , las importaciones han presentado un crecimiento notable y acelerado (8 por ciento, frente al 7,7 registrado en el trimestre anterior). Por el contrario, las exportaciones han desacelerado su crecimiento, desde el 5,9 por ciento registrado en el trimestre anterior, hasta el 5,5 por ciento.
Por su parte, el secretario de Política Económica y Ocupación del PSOE, Jordi Sevilla , una vez finalizada la campaña electoral no ha acusado al INE de manipular los datos. Sin embargo, afirmó que un Gobierno "responsable" debería aprovechar el crecimiento del PIB para avanzar en bienestar social y mejorar las prestaciones sociales que reciben las familias e invertir en la competitividad de las empresas. CCOO y UGT calificaron de "positivo" el crecimiento del PIB pero alertaron del aumento del déficit con el exterior y del "muy preocupante problema de inflación". Por último, las Cámaras de Comercio destacaron que el aumento de la actividad haya superado en más de un punto a la media de la UE y auguraron que el PIB crecerá el 2,5 por ciento en el conjunto del año.
"Mejor tono" del consumo y la inversión
El crecimiento del PIB fue resultado del repunte en la contribución de la demanda interna (3 puntos frente a los 2,8 del cuarto trimestre del 2002) debido al "mejor tono" del gasto en consumo final y de la inversión mientras que, por el contrario, la demanda externa contribuyó de forma más negativa y restó 0,9 puntos frente a los 0,7 del periodo precedente. El INE indica que la economía española "ha estabilizado su ritmo de avance" y destaca que el crecimiento intertrimestral del PIB fue del 0,5 por ciento, dos décimas por encima del trimestre anterior. También fija su atención en el empleo , que creció a un ritmo de 1,5 por ciento, lo que supone una creación neta de 228.000 puestos de trabajo a tiempo completo y un cambio radical en la tendencia que venía presentando en los últimos periodos. Este cambio se debe principalmente a la aceleración del empleo en las ramas industriales y de la construcción.
La mejor evolución del empleo y el incremento de la renta disponible han provocado un crecimiento del gasto del consumo final de los hogares del 2,1 por ciento, dos décimas más que en el trimestre anterior. Además, el consumo colectivo de las Administraciones Públicas aceleró una décima su crecimiento, hasta el 4,3 por ciento, y la inversión aumentó 5 décimas en relación con el trimestre anterior, hasta el 2,9 por ciento, producto del vigor que sigue mostrando la formación bruta de capital en construcción (4,1 por ciento).
En lo que respecta al comercio exterior , las importaciones han presentado un crecimiento notable y acelerado (8 por ciento, frente al 7,7 registrado en el trimestre anterior). Por el contrario, las exportaciones han desacelerado su crecimiento, desde el 5,9 por ciento registrado en el trimestre anterior, hasta el 5,5 por ciento.