LD (EFE) La morosidad de los créditos hipotecarios concedidos en España para adquirir una vivienda se elevó hasta el 0,404 por ciento al cierre del pasado septiembre, debido principalmente al incremento de los préstamos dudosos otorgados por las cajas de ahorro. Según los datos de la Asociación Hipotecaria Española (AHE), la morosidad ha repuntado más de tres centésimas con respecto al 0,373 por ciento del cierre de 2005, cuando la introducción de una normativa más estricta en la consideración de préstamos dudosos hizo aflorar una mayor dudosidad o morosidad.
Así, tras situarse en el 0,385 por ciento en el primer trimestre del año y en el 0,381 por ciento en junio, la morosidad se ha colocado en niveles de marzo de 2003. En el repunte registrado en los nueve primeros meses del año tienen especial protagonismo las cajas de ahorro, que vieron cómo sus créditos morosos aumentaron hasta el 0,409 por ciento, desde el 0,385 por ciento del pasado junio.
Sus máximos competidores, los bancos, que habían reducido durante tres trimestres consecutivos la morosidad de sus préstamos, hasta el 0,300 por ciento de junio, vieron como ésta se elevaba hasta el 0,328 por ciento, aún por debajo del 0,331 por ciento de finales de 2005. Los establecimientos financieros de crédito (EFC), los que más morosidad muestran, también aumentaron el porcentaje de préstamos dudosos hasta el 2,446 por ciento, frente al 2,626 por ciento de diciembre y el 2,756 por ciento de junio.
En el caso de las cooperativas, su morosidad subió ligeramente hasta el 0,385 por ciento respecto al 0,373 por ciento del trimestre anterior. Desde la Asociación Hipotecaria Española se destaca que cualquier comparación realizada con respecto a los valores existentes antes de junio de 2005, "no será del todo precisa por el efecto al alza que introdujo la aplicación de las nuevas normas contables durante esa fecha".
Según los últimos datos publicados por el Banco de España, la tasa de créditos que se consideran morosos de todos los concedidos por las entidades financieras a empresas y particulares se situó en septiembre en el 0,667 por ciento, con lo que tomó de nuevo la senda bajista, tras dos meses de subidas. La cartera total de los préstamos de dudoso cobro de las distintas entidades sumaba a finales de septiembre 9.081 millones de euros, 949 millones más que un año antes, para una cartera crediticia total de 1,359 billones de euros, 279.604 millones más que en el mismo mes de 2005.
Así, tras situarse en el 0,385 por ciento en el primer trimestre del año y en el 0,381 por ciento en junio, la morosidad se ha colocado en niveles de marzo de 2003. En el repunte registrado en los nueve primeros meses del año tienen especial protagonismo las cajas de ahorro, que vieron cómo sus créditos morosos aumentaron hasta el 0,409 por ciento, desde el 0,385 por ciento del pasado junio.
Sus máximos competidores, los bancos, que habían reducido durante tres trimestres consecutivos la morosidad de sus préstamos, hasta el 0,300 por ciento de junio, vieron como ésta se elevaba hasta el 0,328 por ciento, aún por debajo del 0,331 por ciento de finales de 2005. Los establecimientos financieros de crédito (EFC), los que más morosidad muestran, también aumentaron el porcentaje de préstamos dudosos hasta el 2,446 por ciento, frente al 2,626 por ciento de diciembre y el 2,756 por ciento de junio.
En el caso de las cooperativas, su morosidad subió ligeramente hasta el 0,385 por ciento respecto al 0,373 por ciento del trimestre anterior. Desde la Asociación Hipotecaria Española se destaca que cualquier comparación realizada con respecto a los valores existentes antes de junio de 2005, "no será del todo precisa por el efecto al alza que introdujo la aplicación de las nuevas normas contables durante esa fecha".
Según los últimos datos publicados por el Banco de España, la tasa de créditos que se consideran morosos de todos los concedidos por las entidades financieras a empresas y particulares se situó en septiembre en el 0,667 por ciento, con lo que tomó de nuevo la senda bajista, tras dos meses de subidas. La cartera total de los préstamos de dudoso cobro de las distintas entidades sumaba a finales de septiembre 9.081 millones de euros, 949 millones más que un año antes, para una cartera crediticia total de 1,359 billones de euros, 279.604 millones más que en el mismo mes de 2005.