L D (EFE) ITP, participada por Sener Aeronáutica (53,12 por ciento) y Rolls Royce (46,87por ciento), es la responsable del diseño, fabricación y montaje de la turbina de baja presión del motor Trent 900, de Rolls Royce, que empuja el A380. La firma británica anunció el pasado día 6 en Londres su decisión de suspender la fabricación de este motor por un periodo de unos doce meses.
El grupo vasco tiene una participación del 16 por ciento en el programa Trent 900, con lo que es el mayor socio de Rolls-Royce en el programa del motor y supone a su vez la mayor participación de la industria española en el programa A-380. Junto a la empresa matriz se verán afectadas también por la reducción de empleo ITA, que se ha adjudicado importantes paquetes de tubería para el A-380, y PCB, que tiene contratos para el suministro de fundidos para la fabricación de los motores A-380.
Para llevar a cabo todos estos contratos, el grupo, según informó ITP, tiene previsto realizar inversiones hasta 2010, tanto en I+D como en las plantas de producción, por un total de 200 millones de euros. ITP justificó su decisión de acometer este ajuste laboral por los sucesivos retrasos que ha sufrido el programa del A-380, ya que, según explicó, en 2007 solamente se entregará uno, frente a los más de 20 previstos en un principio para ese ejercicio.
Las previsiones apuntan, según ITP, a que en 2009 se entregarán 13 naves y 25 en 2009, con lo que en 2010 se alcanzaría el volumen previsto inicialmente de 45 aviones por año. "Globalmente –recordó ITP– la entrega de aviones por parte de Airbus acumula un retraso de dos años con respecto al plan inicial". Además, según señaló el grupo vasco, la situación viene agravada por "el lento ritmo de ventas" del A340, en cuyo motor, el Trent 500, ITP participa en un 12 por ciento.
El Trent 900, el motor del A380, que es la mayor participación de ITP en un programa civil, supone, según el grupo vasco, "un 20% de la carga de trabajo en producción del área de fabricación de ITP para 2007". "Esto hace –apuntó la empresa– que la compañía requiera realizar ajustes, que se intentarán minimizar con una revisión de las subcontrataciones previstas y la materialización de nuevos contratos a corto y medio plazo".
ITP avanzó que el ajuste en el área de fabricación será compensado a medio plazo con la estrategia de diversificación de la compañía, "que ha alcanzado –indicó– importantes acuerdos con General Electric para la fabricación de turbinas industriales". La situación también "se verá atenuada" por la participación de ITP (12 por ciento) en el motor Trent 1000, que incorpora el Boeing 787. El director europeo de Boeing, Steve Ford, aseguró el pasado 4 de octubre en San Sebastián que el 787 Dreamliner entrará en servicio comercial en 2008 y que ya han sido pedidas 436 unidades por parte de más de 30 aerolíneas de todo el mundo.
El grupo vasco tiene una participación del 16 por ciento en el programa Trent 900, con lo que es el mayor socio de Rolls-Royce en el programa del motor y supone a su vez la mayor participación de la industria española en el programa A-380. Junto a la empresa matriz se verán afectadas también por la reducción de empleo ITA, que se ha adjudicado importantes paquetes de tubería para el A-380, y PCB, que tiene contratos para el suministro de fundidos para la fabricación de los motores A-380.
Para llevar a cabo todos estos contratos, el grupo, según informó ITP, tiene previsto realizar inversiones hasta 2010, tanto en I+D como en las plantas de producción, por un total de 200 millones de euros. ITP justificó su decisión de acometer este ajuste laboral por los sucesivos retrasos que ha sufrido el programa del A-380, ya que, según explicó, en 2007 solamente se entregará uno, frente a los más de 20 previstos en un principio para ese ejercicio.
Las previsiones apuntan, según ITP, a que en 2009 se entregarán 13 naves y 25 en 2009, con lo que en 2010 se alcanzaría el volumen previsto inicialmente de 45 aviones por año. "Globalmente –recordó ITP– la entrega de aviones por parte de Airbus acumula un retraso de dos años con respecto al plan inicial". Además, según señaló el grupo vasco, la situación viene agravada por "el lento ritmo de ventas" del A340, en cuyo motor, el Trent 500, ITP participa en un 12 por ciento.
El Trent 900, el motor del A380, que es la mayor participación de ITP en un programa civil, supone, según el grupo vasco, "un 20% de la carga de trabajo en producción del área de fabricación de ITP para 2007". "Esto hace –apuntó la empresa– que la compañía requiera realizar ajustes, que se intentarán minimizar con una revisión de las subcontrataciones previstas y la materialización de nuevos contratos a corto y medio plazo".
ITP avanzó que el ajuste en el área de fabricación será compensado a medio plazo con la estrategia de diversificación de la compañía, "que ha alcanzado –indicó– importantes acuerdos con General Electric para la fabricación de turbinas industriales". La situación también "se verá atenuada" por la participación de ITP (12 por ciento) en el motor Trent 1000, que incorpora el Boeing 787. El director europeo de Boeing, Steve Ford, aseguró el pasado 4 de octubre en San Sebastián que el 787 Dreamliner entrará en servicio comercial en 2008 y que ya han sido pedidas 436 unidades por parte de más de 30 aerolíneas de todo el mundo.
ITP cuenta con 11 centros de producción en España (Zamudio, Aljalvir, Getafe, San Fernando de Henares y Madrid), Gran Bretaña, México y Estados Unidos y cuenta con una plantilla de 2.400 trabajadores. Los resultados consolidados del Grupo ITP en 2005 superaron los 40 millones de euros, con un incremento del 12 por ciento con respecto al ejercicio anterior, resultando una rentabilidad neta sobre ventas del 11% frente al 10% de 2004, según la compañía.
El nuevo presidente de Airbus, Louis Gallois, afirmó este martes que el plan de ajuste del fabricante de aviones implicará supresiones de empleo "de estructura" pero no de la fabricación y se aplicará siguiendo un principio de "equilibrio entre los diferentes países" socios.
El nuevo presidente de Airbus, Louis Gallois, afirmó este martes que el plan de ajuste del fabricante de aviones implicará supresiones de empleo "de estructura" pero no de la fabricación y se aplicará siguiendo un principio de "equilibrio entre los diferentes países" socios.