Menú

La crisis bancaria de Irlanda amenaza con disparar el déficit al 20%

La prima de riesgo cae y el euro sube tras el éxito de Irlanda en la emisión de deuda pública. El Gobierno irlandés parece así capear el temporal de la pasada semana, pero sigue dependiendo del BCE para colocar bonos. El rescate de su banca amenaza con elevar su deficit público al 20% del PIB.

El euro subió el martes por el éxito de las emisiones de deuda de España e Irlanda en los mercados de capital y tras haberse debilitado por la bajada de la confianza inversora en Alemania en agosto. La moneda única se cambiaba a 1,2890 dólares frente a 1,2845 del lunes. El Tesoro irlandés logró colocar en el mercado de capitales 1.500 millones de euros en bonos mientras que el español colocó con holgura 5.515 millones de euros en letras a 12 y 18 meses a un tipo de interés menor que el registrado en la última subasta de este tipo celebrada el pasado julio.

A primera vista, tales datos arrojan optimismo acerca de la crisis de deuda pública que sufren desde principios de año los países más débiles de la zona euro. Sin embargo, ambas subastas no logran despejar la profunda incertidumbre acerca de la solvencia de dichas economías. No obstante, los países periféricos de la zona del euro (Portugal, Italia, Irlanda, Grecia y España) acapararon la atención de los mercados la semana pasada tras conocerse las cifras del Producto Interior Bruto (PIB) de Grecia y el fracaso de una emisión de deuda en Italia.

Tensión en el mercado de deuda

El PIB de Grecia cayó un 1,5% intertrimestral mientras que Italia tan sólo logró colocar 2.374 millones de euro en bonos a 15 años frente a los 3.500 millones previstos. La desconfianza de los inversores sobre su salud financiera y económica de estos países reavivó las tensiones en el mercado de deuda pública por primera vez desde los stress test (pruebas de solvencia) realizados a los grandes bancos europeos, publicados a finales de julio.

Los credit defaul swaps de los bonos irlandeses a 5 años, un seguro para cubrir los impagos de deuda públicas y privadas, superó la barrera de los 300 puntos básicos el pasado lunes, por primera vez desde marzo de 2009, según datos de CMA Vision.

Este dato se emplea para calibrar el riesgo de quiebra de un país o empresa. Según esta misma agencia, la probabilidad de default de Irlanda ascendió al 20,8% en el segundo trimestre del año, tan sólo superado por Grecia (53%), Argentina (48%) y Portugal (23,6%). España se situó en el quinto puesto del ránking (dentro de los países analizados, que nos son todos), con un riesgo de quiebra del 20,7%.

La rentabilidad de los bonos de los denominados PIIGS se disparó en las últimas jornadas respecto al bono alemán (considerado como el más seguro de Europa), elevándose así la prima de riesgo de estos países. Los peor parados fueron los bonos helenos a 10 años, cuya rentabilidad escaló el pasado viernes una décima, hasta el 10,491%, su nivel más alto desde finales de junio. A continuación figuraron los títulos portugueses y españoles, con un alza de seis centésimas.

Así, el rendimiento de los bonos lusos se colocó en el 5,182% (el tipo más alto en casi tres semanas), mientras que el de los españoles alcanzó el 4,241%, un nivel que no se tocaba desde el pasado 23 de julio, cuando se publicaron las pruebas de solvencia de la banca europea, informa Efe.

Dentro de los países periféricos, la rentabilidad de la deuda italiana a 10 años también sufrió aumentos, de tres centésimas, hasta el 3,858%. La irlandesa subió cuatro centésimas y se colocó en el 5,326% al cierre de una semana en la que su sistema financiero también ha generado incertidumbre, debido a la nueva inyección de capital en el Anglo Irish Bank.

Problemas financieros en Irlanda

Bruselas autorizó el pasado martes la tercera inyección de dinero público en Anglo Irish Bank, que asciende a los 10.054 millones de euros, a la espera de tomar una decisión definitiva sobre el plan de reestructuración de la entidad, enviado por Irlanda a Bruselas el 31 de mayo pasado.

"Anglo Irish Bank necesita una tercera recapitalización de emergencia para cumplir con sus obligaciones. La medida es necesaria para preservar la estabilidad financiera de Irlanda", según señaló entonces el comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia. "Sin embargo, no hay duda de que Anglo Irish Bank necesita una profunda reestructuración que [...] le garantice un futuro sostenible sin el continuo apoyo público", añadió el comisario español.

Hasta el momento, Bruselas ha aprobado otras dos inyecciones de capital de emergencia en el banco, una de las mayores entidades del país. La primera, en 2009, ascendió a los 4.000 millones de euros; mientras que la segunda, en marzo de 2010, fue de 10.440 millones. Así, en total, el Gobierno irlandés ha inyectado cerca de 24.000 millones de euros para rescatar tan sólo a esta entidad, equivalente a algo menos del 15% del PIB nacional.

Pero no es el único con problemas. El Bank of Ireland (BoI), segunda entidad financiera privada de Irlanda, sufrió unas pérdidas brutas de 1.250 millones de euros durante el primer semestre de 2010, 582 millones más que en ese mismo periodo un año atrás.

Así pues, la crisis bancaria persiste en Irlanda. El Gobierno aprobó la creación de un bad bank (banco malo), denominado Agencia Nacional de Gestión de Activos (NAMA), para comprar con dinero público (aunque con un descuento próximo al 50%) los activos tóxicos (en su mayoría créditos inmobiliarios incobrables) que acumula el sistema financiero. Pero los analistas, incluidas las agencias de rating, estiman que la recapitalización pública de la banca arrojará cuantiosas pérdidas a las arcas públicas, de ahí que hayan rebajado su calidad crediticia.

Este tipo de rescates amenazan con disparar el ya abultado déficit público hasta cerca del 20% del PIB, un agujero presupuestario histórico y que casi doblaría al déficit registrado en 2009, según The Wall Street Journal. De este modo, pese a los esfuerzos de contención fiscal aplicados por el Ejecutivo, el coste del rescate bancario amenaza con agrandar aún más el agujero presupuestario del país, con el consiguiente agravamiento de su crisis de deuda pública.

Además, el próximo septiembre se extingue el programa estatal extendido a la banca para garantizar sus emisiones de deuda privada a corto plazo, lo cual amenaza con encarecer las refinanciaciones de los grandes bancos irlandeses.

Sin embargo, de momento, Irlanda cuenta con el apoyo del Banco Central Europeo (BCE), al igual que el resto de países periféricos, gracias a que el pasado mayo puso en marcha un programa extraordinario e inédito en la historia de la institución para monetizar la deuda mediante la compra directa de bonos públicos. El BCE compró bonos del Gobierno irlandés la pasada semana.

"La compra del BCE ofrece al Gobierno irlandés un poco más de margen para poner su casa en orden o cavar su propia fosa", según Ciaran O'Hagan, estratega de renta fija de Societe Generale en París. Y es que, "aún estamos a la espera de observar avances concretos en la contención del déficit presupuestario". Así pues, tanto el Gobierno como el sistema financiero irlandés siguen dependiendo del apoyo del BCE. La cuestión es... ¿por cuánto tiempo?

Temas

En Libre Mercado

    0
    comentarios
    Acceda a los 1 comentarios guardados

    Servicios

    • Radarbot
    • Libro
    • Curso
    • Escultura