El indicador se sitúa así en su nivel más alto desde febrero de 2008, según el Índice que elabora el Instituto de Crédito Oficial (ICO). La confianza se incrementó en julio debido a la mejora del indicador de situación actual, que registró un avance de 9,9 puntos y alcanzó el nivel más elevado desde abril de 2008, hasta los 48,5 puntos, mientras que el indicador parcial de expectativas experimentó un repunte de 9,7 puntos, hasta los 103,8 puntos.
En comparación con un año antes, el indicador de confianza ha aumentado 29,8 puntos, gracias principalmente a la recuperación del indicador de expectativas, que se ha elevado 44 puntos respecto al año anterior, pero también al de la situación actual, que ha mejorado en 15,7 puntos.
Así, el ICO indicó que el indicador "continúa con la recuperación que inició en marzo y su comportamiento puede anticipar que las caídas de consumo privado y del PIB se moderarán en los próximos trimestres, lo que también sería coherente con las mejores expectativas sobre ahorro y compra de bienes de consumo duradero manifestadas este mes por los encuestados".
Además, destacó que aunque los datos sobre el mercado de trabajo continúan siendo negativos, "los signos de freno en su deterioro (caída del paro registrado en junio y menores tasas de crecimiento del desempleo en la EPA del segundo trimestre del año), unidos a las cuantiosas medidas anticrisis del Gobierno, pueden explicar la recuperación de la confianza" de los consumidores que refleja el indicador.
En lo que respecta al indicador de la situación actual, mejoró la opinión de los encuestados acerca de la evolución de los últimos seis meses de los tres aspectos contemplados: economía española (17,3 puntos), mercado de trabajo (7,1 puntos) y economía doméstica (5,3 puntos), que fue el componente que menos aumentó en julio, aunque sigue siendo el aspecto mejor valorado del indicador parcial de situación actual.
Respecto al indicador parcial de expectativas, ha mejorado en lo referente a la economía del país (11,3 puntos), el empleo (9,9 puntos) y la economía del hogar (7,8 puntos), y además los consumidores tienen unas perspectivas optimistas para los próximos seis meses (puesto que los tres componentes son superiores a 100).
Además, el aumento del Indicador de Confianza del Consumidor en julio se observa en los tres grupos provinciales considerados, sobre todo en el de renta per cápita media (entre el 84% y el 116% de la media española), seguido por el grupo de provincias con renta más elevada (superior al 116% de dicha media) y más baja (inferior al 84% de la renta per cápita media española).
Bajan las expectativas de inflación
Por otra parte, en el mes de julio descendieron las expectativas inflacionistas para el próximo año, mientras que aumentaron las perspectivas de subida de tipos de interés y mejoraron las correspondientes a las posibilidades de ahorro y de compra de bienes de consumo duradero.
Así, en comparación con el mismo mes del año pasado, los encuestados manifestaron menores expectativas de subida de precios y de tipos de interés y tienen mejores perspectivas para sus posibilidades de ahorro y de compra de bienes de consumo duradero.