En pleno estallido de la burbuja de deuda pública, Argentina ha editado unos libros de texto muy particulares que han elaborado los responsables del museo de la Deuda Externa. Un museo que ha vuelto a abrir sus puertas en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires.
El objetivo no es otro que los jóvenes aprendan los problemas que se derivan del endeudamiento. Para que llegue mejor el mensaje a los jóvenes de la escuela secundaria de Argentina, esta iniciativa está basada en la edición de cuatro cómics en los que se hacen parábolas sobre la deuda pública.
El FMI protagoniza el cómic "Un intruso en la familia", que analiza los más de 50 años de relación entre Argentina y el organismo financiero. Precisamente éste está representado por un joven llamado Francis que logra deshacerse del padre de su novia, Patricia, y quedarse con su negocio, al que finalmente lleva a la ruina.
La parábola de esta historia es que Francis consuma sus malignos designios al casarse con Patricia, de quien se divorcia tras la crisis de 2001, cuando Argentina declaró la mayor suspensión de pagos de la historia (unos 102.000 millones de dólares).
Las acciones de Francis, un galán rubio y norteamericano, coinciden con la opinión del Gobierno de Cristina Fernández acerca de las "recetas" y planes de ajuste del FMI, al que Argentina le canceló todas sus deudas (unos 9.500 millones de dólares) en un solo pago en 2006.
"No nos damos cuenta de que hay cosas que no podremos hacer en el futuro si permitimos que crezca la deuda y los jóvenes deben ser conscientes de los errores del pasado cuando emitan su voto", explica a Efe el decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, Alberto Barbieri.
La deuda externa argentina sumaba 147.119 millones de dólares al final de 2009, cifra equivalente al 47% del PIB del país sudamericano, según datos oficiales.
El empréstito con Baring Brothers
Otro de los cómics provistos a alumnos de escuelas secundarias retratan la evolución de la deuda externa argentina desde 1824 -cuando el país solicitó a la banca británica Baring Brothers un empréstito por 700.000 libras esterlinas- hasta 1976, cuando un golpe de estado dio paso a una cruenta dictadura militar.
La dictadura militar en dibujos
Un tercero relata la "saga" del endeudamiento desde la dictadura militar (1976-1983) hasta la actualidad, mientras que la historieta restante analiza los proyectos de canje de deuda por inversiones en educación impulsados en los últimos años por Argentina y Brasil.
Las malvadas naciones del hemisferio norte
En el cuarto, las viñetas reflejan la cronología del endeudamiento a partir del viaje de unos extraterrestres al Buenos Aires del año 3668, cuando la ciudad está devastada por el "gran holocausto nuclear" de 2268 que supuso la extinción de los seres humanos.
En el transcurso del relato, los alienígenas descubren que la aniquilación de la Humanidad no respondió a un desastre nuclear sino a un "proceso de autoeliminación sistemática" incentivado por las "naciones del hemisferio norte" en el último cuarto del siglo XX.
"Estas naciones -prosigue el cómic- activaron un curioso mecanismo de desintegración social, una combinación de codicia, mediocridad e ignorancia. Todo ello reproducido desde un núcleo compacto de concentración de poder".
Las viñetas analizan además la mala gestión económica de diversos gobiernos argentinos, como los jerarcas de la última dictadura militar que en 1983 dejaron como "herencia" una deuda exterior de unos 45.000 millones de dólares, seis veces más que la que había cuando usurparon el poder, en 1976.
También retratan el Plan de Convertibilidad con paridad de "uno a uno" entre el peso y el dólar, lanzado en 1990 por el Gobierno de Carlos Menem (1989-1999) y que tuvo un abrupto final en enero de 2002, con el corralito financiero, como consecuencia del cese de pagos de fines del año anterior, cuando Argentina acumulaba cuatro años consecutivos de recesión.
Los cómics muestran al "uno a uno" entre el peso y el dólar como una "venenosa poción griega", propia del Olimpo, que "colapsó" la economía argentina y "disparó" las desigualdades sociales.
"Frente a tal catástrofe, en el Fondo Monetario sólo se les ocurría aplicar planes de ajuste, mientras que los agentes financieros volvían a la ofensiva para consolidar su poder y seguir transfiriendo ingresos a su favor", se lamenta uno de los protagonistas.
La Universidad de Buenos Aires, la mayor del país, trabaja con los ministerios de Educación y de Economía para que asegurar que estos cómics didácticos lleguen a todas las escuelas argentinas.