(Libertad Digital) El "sudoku" que tiene que resolver Solbes aumenta su dificultad cada día. Además de asumir la deriva populista del Jefe del Ejecutivo, con sus anuncios electoralistas, Solbes tiene que hacer frente a las presiones nacionalistas que llegan desde el Norte y el Sur.
El ministro cedía ante la insistencia de Chaves y concedía a Andalucía una inversión superior a los 4.000 millones de euros más un anticipo de 300 millones en concepto de deuda histórica. Antes, había firmado un acuerdo con el consejero de Economía de la Generalidad para destinar a Cataluña más de 4.000 millones de euros con objeto de cumplir el estatuto.
Además, Solbes tendría que estirar el superávit a cuenta de los pisos subvencionados de Chacón y su correspondiente rebaja fiscal, el cheque bebé que Zapatero copió del programa electoral del PP o la salud bucodental que Bernat Soria confía en colar en el texto final de los presupuestos. Por si fuera poco, Industria acató la orden de Moncloa y ha congelado las tarifas eléctricas.
Madrid la más perjudicada
Un rompecabezas presupuestario que ha tenido un claro perdedor. La Comunidad de Madrid comprobaba cómo el Ejecutivo le había relegado a la última posición en crecimiento de inversión presupuestaria. Además, para sorpresa del Ejecutivo madrileño, la mitad de lo presupuestado se destinaría al "saneamiento" de Ceuta y Melilla, la seguridad de las Costas, amueblar Ministerios y para La Moncloa.
Ante el enfado de Esperanza Aguirre, De la Vega acusó a la presidenta madrileña de no haber entregado a tiempo las propuestas de inversión en infraestructuras. Una acusación que quedó desmentida el mismo día después de que Libertad Digital publicase una carta en la que Moncloa le agradecía haber entregado dichas propuestas en tiempo y forma.
Por si fuera poco, este mismo lunes, José Blanco cargaba contra la presidenta de la Comunidad de Madrid y la acusaba de “falta de patriotismo” porque, en su opinión, “Madrid ya tiene de todo”.
El mercado persa ya está aquí
Pero los problemas presupuestarios de Solbes crecen. Este martes, los socios del Gobierno le han dado la espalda y han comenzado a materializar las exigencias nacionalistas que pretenden colarse en los PGE. Una situación que Solbes podría haber querido evitar cuando, según publicó la COPE, propuso a Zapatero un adelanto electoral. IU, ERC, y CIU, se han unido al PP y han anunciado sendas enmiendas a la totalidad del proyecto de Presupuestos Generales del Estado.
Desde CiU, Duran i Lleida ha justificado su enmienda en que este año se sigue sin cumplir con lo pactado en la disposición adicional tercera del Estatut sobre las inversiones del Estado en Cataluña.
Por su parte, ERC asegura que "una vez observado el Presupuesto, no hallamos la traducción del acuerdo político sobre el papel de la ley, especialmente en lo que se refiere a garantizar las inversiones y que aquello que no se ejecute a final de año será retornado a la Generalidad". A juicio de ERC, "falta concreción y compromiso para que el acuerdo político se traduzca y se plasme en de la Ley de Presupuestos".