LD (EFE) Italia entra en recesión técnica. Así de claro lo han dejado las cifras de la economía publicadas este viernes, que indican que el PIB de ese país se contrajo por segundo trimestre consecutivo. En línea con lo esperado por los analistas, la economía italiana volvió a retroceder una décima, con lo que entra en recesión técnica, pese a que el crecimiento interanual hasta junio fue del 0,3 por ciento.
Con este dato, Italia se une a Alemania, que ya alcanzó la recesión técnica, y Francia, que se encuentra cerca de ella. Pese a todo, el Banco Central Europeo (BCE) afirmó el pasado jueves que la economía de la Eurozona experimentará una recuperación lenta pero sostenida durante la segunda mitad del año en curso. Muchos analistas ya han calificado estas afirmaciones como excesivamente positivas.
La reducción coyuntural del PIB es el resultado de descensos en la agricultura y en la industria italianas, aunque el sector de los servicios ha incrementado su valor, según la estimación de Estadísticas. Además, la producción industrial no registró ninguna variación durante el mes de junio, aunque desde el punto de vista interanual retrocedió un 1,7%.
Hay que remontarse a 1992 para recordar en Italia una caída del PIB en dos trimestres seguidos, situación que se ha dado ahora después de que 2002 se cerrara con un crecimiento de la riqueza interna del 0,4 por ciento. La última variación negativa del PIB fue del 0,1 por ciento en el cuarto trimestre de 2001, aunque no fue secundada en los tres meses siguientes.
Con este dato, Italia se une a Alemania, que ya alcanzó la recesión técnica, y Francia, que se encuentra cerca de ella. Pese a todo, el Banco Central Europeo (BCE) afirmó el pasado jueves que la economía de la Eurozona experimentará una recuperación lenta pero sostenida durante la segunda mitad del año en curso. Muchos analistas ya han calificado estas afirmaciones como excesivamente positivas.
La reducción coyuntural del PIB es el resultado de descensos en la agricultura y en la industria italianas, aunque el sector de los servicios ha incrementado su valor, según la estimación de Estadísticas. Además, la producción industrial no registró ninguna variación durante el mes de junio, aunque desde el punto de vista interanual retrocedió un 1,7%.
Hay que remontarse a 1992 para recordar en Italia una caída del PIB en dos trimestres seguidos, situación que se ha dado ahora después de que 2002 se cerrara con un crecimiento de la riqueza interna del 0,4 por ciento. La última variación negativa del PIB fue del 0,1 por ciento en el cuarto trimestre de 2001, aunque no fue secundada en los tres meses siguientes.