En todos los casos, excepto Barcelona, se encuentran por debajo de las rentabilidades obtenidas por la vivienda. Esta cifra representa el rendimiento que la renta mensual de la plaza aparcamiento alquilada ofrece al propietario. La rentabilidad de las letras del tesoro a doce meses (el contrato más frecuente en este tipo de arrendamientos) es del 2,4%
Barcelona es la capital española en la que más rentabilidad se obtiene por una plaza de garaje, con un 4,3%. La ciudad condal es la única con rentabilidades superiores a las generadas por la vivienda situada en el 3,5%. Con rentabilidades superiores al tres por ciento encontramos a Málaga (3,4%), palma de Mallorca (3,4%), Valencia (3,2%) y Madrid (3,2%). córdoba tiene una rentabilidad del 3%.
En las capitales con los porcentajes de rentabilidad más altos, teniendo en cuenta los precios del alquiler, la compra de una plaza de garaje se amortizaría antes y, por lo tanto, podría ser una opción para posibles inversores que quisieran comprar este tipo de producto para ponerlo en alquiler
Sin embargo, las rentabilidades más bajas de España son las que obtienen los propietarios de garajes en alquiler en Valladolid (2,1%) y Zaragoza (2,2%). a continuación se sitúan Murcia, Granada y Santander (los tres con 2,6%)
Según Fernando Encinar, jefe de estudios de idealista.com, "el desplome de la burbuja inmobiliaria ha provocado que invertir en plazas de garaje ya no sea tan rentable. Con la crisis de los precios ahora sale más rentable comprar una casa para alquilarla que hacer la misma operación con una plaza de garaje"
Para la elaboración de este estudio, idealista ha dividido el precio medio de alquiler anual del m2 entre el precio del m2 en venta en las diferentes capitales de provincia españolas referente al cuarto trimestre de 2010. El resultado obtenido es el porcentaje bruto de rentabilidad que proporciona a un propietario alquilar su plaza. Este dato facilita el análisis del estado actual del mercado y es un punto de partida básico para todos aquellos inversores que quieran comprar activos inmobiliarios con el fin de obtener beneficios.