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Interior asegura que no puede demostrar que la Guardia Civil siguiera a Pizarro

El departamento que dirige Pérez Rubalcaba ha asegurado que la información reservada abierta a raíz de que los escoltas del presidente de Endesa, Manuel Pizarro, denunciaran seguimientos por parte de dos guardias civiles, ha concluido sin poder demostrarlos, aunque afirma que se mantiene abierta otra investigación interna. En febrero, la seguridad de Pizarro descubrió a dos agentes de la Guardia Civil siguiéndole mientras Zapatero y Prodi se reunían en Ibiza. En el mes de junio, unos agentes del CNI dieron el alto a uno de los escoltas del presidente de Endesa.

El departamento que dirige Pérez Rubalcaba ha asegurado que la información reservada abierta a raíz de que los escoltas del presidente de Endesa, Manuel Pizarro, denunciaran seguimientos por parte de dos guardias civiles, ha concluido sin poder demostrarlos, aunque afirma que se mantiene abierta otra investigación interna. En febrero, la seguridad de Pizarro descubrió a dos agentes de la Guardia Civil siguiéndole mientras Zapatero y Prodi se reunían en Ibiza. En el mes de junio, unos agentes del CNI dieron el alto a uno de los escoltas del presidente de Endesa.
LD (Europa Press) La respuesta de Interior, a la que tuvo acceso Europa Press, se dirige al diputado del PP Ignacio Gil Lázaro, que a finales de mayo había pedido más explicaciones al Gobierno sobre este caso con intención de llegar "al fondo político" de los seguimientos por agentes del Instituto Armado denunciados por el presidente de Endesa, Manuel Pizarro.
 
Interior ya había admitido en primavera, en otra respuesta a Gil Lázaro, que dos miembros de la Guardia Civil se habían visto involucrados en la denuncia que se presentó en su día por supuestos seguimientos a Pizarro, pero recalcaba que "en el incidente no intervino ningún vehículo" de la Benemérita y que los dos agentes estaban fuera de servicio el día de los hechos: uno por baja médica y el otro en su día libre.
 
Según el Gobierno, la denuncia motivó la apertura de unas diligencias en el Juzgado de Instrucción número 44 de Madrid, cuyo titular "dispuso el sobreseimiento". Paralelamente, la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid abrió una información reservada para depurar las responsabilidades disciplinarias al personal implicado.
 
Sin embargo, Gil Lázaro no se dio por satisfecho y pidió más detalles al considerar que se trata de hechos que constituyen "un elemento grave de preocupación", por lo que reclamó más datos al Gobierno para llegar "al fondo político".
 
El Ministerio del Interior acaba de responder a esta segunda pregunta de Gil Lázaro señalando que aquella información reservada abierta a raíz de las denuncias de Pizarro se terminó el 18 de mayo y "no ha podido demostrar los supuestos seguimientos".
 
En cualquier caso, Interior sostiene que, tal y como afirmó en su día el director general de la Policía y de la Guardia Civil, Joan Mesquida, sigue abierta una "investigación interna".
 
Los supuestos seguimientos por guardias civiles no fueron los únicos que denunciaron los escoltas de Pizarro, pues semanas después, en junio de este año, tuvieron un 'encontronazo' con agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que, según aseguraron, estaban allí en otra misión ajena al presidente de Endesa.

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