(Libertad Digital) El texto denuncia que "a pesar de la debilidad del sistema energético de la Unión Europea los Estados miembros están intentando mantener cautivos los mercados nacionales con el propósito de proteger compañías que controlan o con las que de alguna manera están relacionados". Y hace mención expresa de "la decisión del gobierno francés de sancionar la fusión de Gaz de France y Suez para prevenir la oferta de la compañía italiana Enel, así como la oposición del gobierno español a la adquisición de Endesa por parte del grupo alemán E.On".
Esta práctica, continúa el texto, "no sólo echa por tierra el sueño de una Europa económicamente integrada sino que además tendrá un horrible impacto adverso sobre los consumidores". Por ello, advierte a los líderes y a los ciudadanos de Europa, de que "la cortedad de visión de estas políticas, que amenazan la competitividad de nuestras empresas y la estabilidad de nuestra economía, por una potencial ventaja a corto plazo".
A la vista de esta situacíón, el manifiesto, que ha sido publicado en varios diarios europeos, como el Financial Times, Le Figaró o Libertad Digital, urge "a la Comisión Europea, así como a los Gobiernos nacionales, a promover una mayor integración económica, especialmente en un sector estratégico, como es la energía".
Tres propuestas
Para ello propone tres medidas. La primera es la eliminación de "las barreras a la consolidación de compañías europeas, absteniéndose de impedir cualquier adquisición de empresas nacionales por firmas extranjeras". Exige asimismo que los Estados "vendan sus participaciones mayoritarias en las compañías de energía, cuando sean de propiedad pública", y que "abran todos los mercados domésticos para promover el desarrollo de un mercado interno europeo genuino".
Entre los primeros firmantes están el ex ministro de Economía de Francia Alain Madelin, el ministro italiano de Defensa, Antonio Martino, entre varias personalidades y economistas de prestigio. Junto con el Juan de Mariana, ha sido promovido por el Instituto Bruno Leoni, de Italia, el Liberalni Institut de Praga y el Lithuanian Free Market Institute, de Lituania.