L D (EFE) El informe de Planner, ASPRIMA y AFI asegura que este crecimiento se deberá, en parte, a la disminución de la media del número de personas por familia, que actualmente se sitúa en 2,86 unidades. Esta realidad provocará que sea necesario construir más viviendas, de menor tamaño , porque las unidades familiares, a pesar de disminuir en tamaño, aumentarán en número. Otro fenómeno asociado al fuerte ritmo de creación de nuevos hogares, paralelo al fenómeno de reducción del tamaño medio de los mismos, es el de la intensa entrada de inmigrantes.
En cuanto a la situación actual, uno de los aspectos destacados por el informe es el de la segunda vivienda , que en la actualidad constituye el 16 por ciento del parque total de viviendas en España, uno de los ratios más elevados de toda la Unión Europea. El informe atribuye este hecho al importante peso de la demanda turística en nuestro país, que se ha visto impulsada por la consolidación de la Unión Monetaria Europea. La convergencia monetaria europea ha supuesto la eliminación explícita del riesgo de cambio, lo que, según apunta el estudio, ha permitido incorporar al mercado inmobiliario español una importante demanda potencial, procedente países comunitarios, principalmente de Alemania.
Optimismo de Analistas Financieros Internacionales
El director general de AFI, Ángel Bergés, se mostró convencido de que los precios en el sector "se moderarán", gracias a factores que ya empiezan a manifestarse en la actual coyuntura económica, como son el ligero repunte de los tipos de interés y la “paulatina liberalización del suelo”. En este mismo sentido, el consejero delegado de AFI, Emilio Ontiveros, también aseguró que la actual burbuja inmobiliaria "no pinchará" sino que será asimilada por el propio mercado, gracias a la fortaleza del mercado de trabajo, a los bajos niveles de morosidad y a las potenciales inversiones extranjeras propiciadas por la convergencia monetaria. Añadió que, a pesar de que los precios del sector han crecido de forma espectacular durante los últimos años, estos podrían haber sido incluso mayores de no haber sido por la fuerte capacidad de respuesta de la oferta, que, según los datos más recientes, ha situado en cerca de 600.000 el número de viviendas terminadas.
El informe, a modo de conclusión, dice que, a pesar de que el esfuerzo financiero para la adquisición de la vivienda ha aumentado fuertemente en los últimos años, esta tendencia es similar a la del resto de países comunitarios. En concreto, señala que si en el 2002, para adquirir una vivienda en España era necesario destinar algo más de seis salarios anuales brutos, estos niveles son similares a los del Renio Unido y relativamente superiores a la media de 5,5 salarios correspondientes a Francia.
Duras críticas de la AHE al informe de "The Economist"
La Asociación Hipotecaria Española (AHE) ha descartado que los precios de la vivienda en España estén altamente sobrevalorados y vayan a bajar un 30 por ciento en los cuatro próximos años y ha asegurado que el estudio de "The Economist" que así lo vaticinaba es "insostenible". La AHE opina que estas previsiones se basan en un estudio que refleja un "conocimiento insuficiente de la dinámica y comportamiento del mercado residencial en España" y que carece de un análisis riguroso de la composición y perfil de los compradores de viviendas en los últimos años. La Asociación Hipotecaria dice que la conclusión del informe, que da por buena una sobrevaloración media del 52 por ciento en el precio de la vivienda, es "insostenible" ya que tiene en cuenta el alto precio del alquiler y considera que este mercado está muy desarrollado, cuando la realidad es que es prácticamente inexistente.
Critica, además, que realice "afirmaciones generales y, aparentemente, sin datos fiables", sobre todo, al asegurar que un gran número de los compradores en los últimos años son inversores. Según la Asociación Hipotecaria, el 64,6 por ciento de las compras realizadas entre 1991 y 2001 fue para residencia principal, y otro 16,5 por ciento, para segunda vivienda, mientras que las adquisiciones como inversión superaron escasamente el 10 por ciento. La agrupación presidida por Gregorio Mayayo lamenta que una revista de "tan amplia cobertura y prestigio realice pronósticos tan apocalípticos basados en un conocimiento insuficiente de la dinámica y comportamiento del mercado residencial en España".
En cuanto a la situación actual, uno de los aspectos destacados por el informe es el de la segunda vivienda , que en la actualidad constituye el 16 por ciento del parque total de viviendas en España, uno de los ratios más elevados de toda la Unión Europea. El informe atribuye este hecho al importante peso de la demanda turística en nuestro país, que se ha visto impulsada por la consolidación de la Unión Monetaria Europea. La convergencia monetaria europea ha supuesto la eliminación explícita del riesgo de cambio, lo que, según apunta el estudio, ha permitido incorporar al mercado inmobiliario español una importante demanda potencial, procedente países comunitarios, principalmente de Alemania.
Optimismo de Analistas Financieros Internacionales
El director general de AFI, Ángel Bergés, se mostró convencido de que los precios en el sector "se moderarán", gracias a factores que ya empiezan a manifestarse en la actual coyuntura económica, como son el ligero repunte de los tipos de interés y la “paulatina liberalización del suelo”. En este mismo sentido, el consejero delegado de AFI, Emilio Ontiveros, también aseguró que la actual burbuja inmobiliaria "no pinchará" sino que será asimilada por el propio mercado, gracias a la fortaleza del mercado de trabajo, a los bajos niveles de morosidad y a las potenciales inversiones extranjeras propiciadas por la convergencia monetaria. Añadió que, a pesar de que los precios del sector han crecido de forma espectacular durante los últimos años, estos podrían haber sido incluso mayores de no haber sido por la fuerte capacidad de respuesta de la oferta, que, según los datos más recientes, ha situado en cerca de 600.000 el número de viviendas terminadas.
El informe, a modo de conclusión, dice que, a pesar de que el esfuerzo financiero para la adquisición de la vivienda ha aumentado fuertemente en los últimos años, esta tendencia es similar a la del resto de países comunitarios. En concreto, señala que si en el 2002, para adquirir una vivienda en España era necesario destinar algo más de seis salarios anuales brutos, estos niveles son similares a los del Renio Unido y relativamente superiores a la media de 5,5 salarios correspondientes a Francia.
Duras críticas de la AHE al informe de "The Economist"
La Asociación Hipotecaria Española (AHE) ha descartado que los precios de la vivienda en España estén altamente sobrevalorados y vayan a bajar un 30 por ciento en los cuatro próximos años y ha asegurado que el estudio de "The Economist" que así lo vaticinaba es "insostenible". La AHE opina que estas previsiones se basan en un estudio que refleja un "conocimiento insuficiente de la dinámica y comportamiento del mercado residencial en España" y que carece de un análisis riguroso de la composición y perfil de los compradores de viviendas en los últimos años. La Asociación Hipotecaria dice que la conclusión del informe, que da por buena una sobrevaloración media del 52 por ciento en el precio de la vivienda, es "insostenible" ya que tiene en cuenta el alto precio del alquiler y considera que este mercado está muy desarrollado, cuando la realidad es que es prácticamente inexistente.
Critica, además, que realice "afirmaciones generales y, aparentemente, sin datos fiables", sobre todo, al asegurar que un gran número de los compradores en los últimos años son inversores. Según la Asociación Hipotecaria, el 64,6 por ciento de las compras realizadas entre 1991 y 2001 fue para residencia principal, y otro 16,5 por ciento, para segunda vivienda, mientras que las adquisiciones como inversión superaron escasamente el 10 por ciento. La agrupación presidida por Gregorio Mayayo lamenta que una revista de "tan amplia cobertura y prestigio realice pronósticos tan apocalípticos basados en un conocimiento insuficiente de la dinámica y comportamiento del mercado residencial en España".