Hungría planea solicitar un "crédito precautorio" al Fondo Monetario Internacional (FMI) para fortalecer la confianza de los mercados, dijo György Szapáry, asesor económico del primer ministro, Viktor Orbán.
Hungría no utilizaría ese préstamo, que de esta manera serviría de reserva para fortalecer la confianza de los mercados y por otra parte funcionaría como un indicador de que el país sigue siendo solvente, informa este miércoles la prensa económica local.
El "préstamo precautorio" tendría como objeto que Hungría pudiera acceder a otros créditos con mejores condiciones, dijo Szapáry, quien no precisó el monto de la operación con el FMI. Hungría se vio obligada en octubre de 2008 a acudir a préstamos internacionales del FMI, de la Unión Europea y del Banco Mundial por 20.000 millones de euros para salvarse de la bancarrota, que vencen a finales de octubre de este año.
En este sentido, el economista explicó que Hungría también quiere prolongar el plazo de estos préstamos hasta finales del año y acudir al "crédito de precautorio" del FMI a partir de 2011, de ser necesario. Szapáry agregó que por ahora el Estado húngaro no tiene intención de obtener más dinero del crédito del FMI y de la UE, del que ha utilizado hasta ahora 14.000 millones de euros.
A principios de junio el nuevo Gobierno húngaro reconoció que la situación económica del país es muy grave y que habría que evitar el camino de Grecia. El nuevo portavoz del Gobierno húngaro declaró entonces que la "economía (del país) está en una situación muy grave".