L D (Agencias) El secretario de Estado español para la UE, Alberto Navarro, informó en conferencia de prensa de la iniciativa conjunta, respaldada, entre otros por Italia, Luxemburgo y Austria, que fue presentada a Blair por el presidente francés, Jacques Chirac, en una reunión que mantuvieron ambos y de la que informó después a Zapatero. Además de la reforma del "cheque británico", la propuesta aborda también la denominada "cláusula de revisión" para una reforma general de los ingresos y gastos de la UE, que entraría en vigor en el año 2014, al término del próximo periodo presupuestario.
Navarro subrayó que Francia, Italia y España son los países más interesados, por este orden, en la reforma del "cheque británico" pero añadió que la propuesta podrá ir sumando el apoyo de nuevos países a medida que sea conocida, si bien "a quien hay que convencer es a la presidencia británica". El secretario de Estado confió en que la propuesta presentada a Blair permita "desbloquear" las negociaciones con un resultado "satisfactorio" para España, pues contempla "un reparto equitativo del coste de la ampliación". La adhesión de nuevos miembros, según la propuesta, no se incluiría en el cálculo del Reino Unido para su "cheque".
Navarro subrayó que Francia, Italia y España son los países más interesados, por este orden, en la reforma del "cheque británico" pero añadió que la propuesta podrá ir sumando el apoyo de nuevos países a medida que sea conocida, si bien "a quien hay que convencer es a la presidencia británica". El secretario de Estado confió en que la propuesta presentada a Blair permita "desbloquear" las negociaciones con un resultado "satisfactorio" para España, pues contempla "un reparto equitativo del coste de la ampliación". La adhesión de nuevos miembros, según la propuesta, no se incluiría en el cálculo del Reino Unido para su "cheque".
Mientras, ante el rechazo generalizado de la anterior propuesta británica, el gobierno de Tony Blair pretendía presentar este viernes un nuevo proyecto que puedan aprobar los 25. Reino Unido estaría dispuesto a hacer algunas concesiones, como reconoció Jack Straw al asegurar que su país debe tener más "flexibilidad" con el "cheque británico". Dicha propuesta llegará con retraso, a media tarde, cuando termine el almuerzo entre los jefes de Estado y de Gobierno de los Veinticinco, donde tendrán ocasión de expresarse los líderes que no lo han hecho todavía a través de reuniones bilaterales. Un portavoz de la Presidencia británica añadió que habrá después más encuentros pues "todavía queda mucho que hacer".
La propuesta que hay actualmente sobre la mesa supone limitar el techo del presupuesto al 1,03% del PIB de la UE y mantener el cheque. Ése es precisamente el principal obstáculo para su aprobación. La última propuesta de los ingleses dejaba intacta la cantidad que se reintegra al Reino Unido como compensación del gasto europeo en la Política Agraria Común (PAC) de la que los británicos no se benefician. Por ello, se espera que la principal novedad de la que se presente suponga una reducción del montante del dinero que reciben los ingleses.
A cambio de esta cesión de los británicos, se haría alguna revisión del gasto, incluido el agrícola, a partir de 2008, lo que requeriría que países como Francia o España, unos de los principales beneficiarios de la PAC, cedieran en su postura. Para alcanzar un acuerdo previo a la presentación del nuevo proyecto de presupuestos a los 25, el primer ministro británico, Tony Blair, inició este viernes una ronda de contactos bilaterales con el presidente francés, Jacques Chirac, el español, José Luis Rodríguez Zapatero y la canciller alemana, Angela Merkel, entre otros.
Zapatero aseguró que acudía a su encuentro con Blair con "expectativas razonables" de que la próxima propuesta sobre el presupuesto de la UE sea mejor para los intereses españoles que la que él mismo rechazó el pasado mes de junio, bajo presidencia luxemburguesa de la UE, que dejaba a España con un saldo neto positivo de 4.800 millones de euros para todo el periodo. No se pronunciaba sin embargo sobre la que está sobre la mesa, que reduce en 500 millones de euros el dinero que recibe nuestro país.
Merkel, entretanto, se mostró pesimista respecto a los resultados de la cumbre, al asegurar que las negociaciones transcurren de manera "muy difícil". Un portavoz oficial sueco indicó que Alemania sugirió que el Reino Unido sitúe su oferta sobre el "cheque británico" a medio camino entre lo ofrecido hasta ahora (8.000 millones de euros) y lo pedido por Francia (14.000 millones), lo que situaría la cantidad en 11.000 millones.
Mientras, el primer ministro sueco, Goran Persson consideró que la solución debe pasar por una reducción del "cheque británico", como reclaman España y Francia, y, al tiempo, por una "modernización del presupuesto", en referencia a la cláusula de revisión de la Política Agrícola Común que exige el Reino Unido. En su opinión, las posibilidades de alcanzar hoy una solución sobre esa base están "al cincuenta por ciento" y advirtió de que "un mal acuerdo podría ser incluso peor".