LD (EFE) Rodríguez Zapatero ha recibido a Vanhanen en el Palacio de la Moncloa, en la primera visita oficial del primer ministro finlandés a España y, en conferencia de prensa, han destacado que pese a la lejanía geográfica de sus países, están muy cerca en asuntos esenciales de futuro para la Unión Europea. Una especie de "armonía de lo distante", según Zapatero, quien junto con Vanhanen defendió la necesidad de negociar cuanto antes las futuras perspectivas financieras de la UE y de garantizar en esa negociación el principio de cohesión.
En ese contexto, el primer ministro finlandés apoyó las tesis de Zapatero y dijo que la transición a la hora de recortar los fondos comunitarios en el caso de países como España no puede ser abrupta, sino que debe desarrollarse de forma "suave". El presidente del Gobierno español agradeció que Europa haya hecho mucho por España y, en coherencia con lo recibido, reconoció que ahora son otros países, especialmente los de la ampliación, los que necesitan más de los fondos comunitarios. "España está dispuesta a ser coherente y a aportar su esfuerzo de contribución, a arrimar el hombro sin poner mala cara", aseguró Zapatero, quien entendió razonable que el país vea disminuir ahora las ayudas comunitarias, pero de forma "paulatina, tranquila".
En cuanto al proceso de ratificación de la Constitución Europea, Zapatero dijo que "España ha hecho los deberes" y confía en que ese proceso "navegue y no encalle", de ahí que subrayara la importancia del referéndum convocado para el próximo 29 de mayo en Francia. Vanhanen, quien entre bromas dijo que Zapatero podría ganar "la Copa de Europa de simpatía y amabilidad" , elogió el resultado "con cifras muy claras" del referéndum de ratificación del Tratado Constitucional celebrado en España, y dijo que fue "un ejemplo muy positivo de cómo se tiene que proceder".
En ese contexto, el primer ministro finlandés apoyó las tesis de Zapatero y dijo que la transición a la hora de recortar los fondos comunitarios en el caso de países como España no puede ser abrupta, sino que debe desarrollarse de forma "suave". El presidente del Gobierno español agradeció que Europa haya hecho mucho por España y, en coherencia con lo recibido, reconoció que ahora son otros países, especialmente los de la ampliación, los que necesitan más de los fondos comunitarios. "España está dispuesta a ser coherente y a aportar su esfuerzo de contribución, a arrimar el hombro sin poner mala cara", aseguró Zapatero, quien entendió razonable que el país vea disminuir ahora las ayudas comunitarias, pero de forma "paulatina, tranquila".
En cuanto al proceso de ratificación de la Constitución Europea, Zapatero dijo que "España ha hecho los deberes" y confía en que ese proceso "navegue y no encalle", de ahí que subrayara la importancia del referéndum convocado para el próximo 29 de mayo en Francia. Vanhanen, quien entre bromas dijo que Zapatero podría ganar "la Copa de Europa de simpatía y amabilidad" , elogió el resultado "con cifras muy claras" del referéndum de ratificación del Tratado Constitucional celebrado en España, y dijo que fue "un ejemplo muy positivo de cómo se tiene que proceder".